De acuerdo con Jhonatan Pisco, profesional del Grupo Halley de Astronomía y Ciencias Aeroespaciales de la UIS, en la capital de Santander será difícil ver la lluvia de meteoritos por la contaminación lumínica. Pero eso no significa que los bumangueses no tengan opción.
“Si van a Berlín o a la Mesa, a algún sitio no tan poblado, el cielo estará más libre y podrá verse mejor este fenómeno astronómico llamado las Gemínidas”, explicó Pisco, quien maneja los equipos del instituto.
Este viernes, informó el profesional, será el pico en donde se verá mejor este fenómeno considerado como uno de los más bonitos del mundo. Para ver la lluvia de meteoros no se necesita telescopio, solo basta con armarse de paciencia pues si el cielo no está despejado, las Gemínidas no se podrán con su majestuosidad total.
“En Bucaramanga se podrán ver desde las 8:00 p.m. hasta las 6:00 a.m, del cénit, o el punto más elevado en el cielo por sobre quien observa, a 90 grados de su cabeza hacia el nororiente. Hay que tener claro que depende mucho del clima, pero por lo visto, sí se podrá observar”, comentó Pisco.
En el mundo
“Las gemínidas son un fenómeno astronómico que se registra en diciembre y tiene la particularidad de verse antes de la media noche, con un promedio entre 50 y 100 meteoros por hora”, explicó el codirector del Grupo de Ciencias Planetarias y Astrobiología de la Universidad Nacional, David Tovar.
De acuerdo con el docente, puesto que el desplazamiento de la Tierra alrededor del Sol tiene el mismo sentido que el asteroide conocido como ‘3.200 Phaeton’, el observador tendrá la posibilidad de apreciar la lluvia de partículas que se desprende del cuerpo celeste sin la rapidez de otros fenómenos similares.
“Esta lluvia de estrellas se puede observar desde cualquier lugar del país, siempre y cuando sea oscuro y apartado de la contaminación lumínica de los grandes centros urbanos, a pesar de que nos encontramos en la fase de Luna creciente”, agregó el experto.
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Tovar indicó que el fenómeno se trata de fragmentos muy pequeños que al entrar en contacto con la atmósfera terrestre se desintegran dejando una estela, de ahí que popularmente se conozcan como “lluvia de estrellas” o “estrellas fugaces”.
“Puesto que estos asteroides o cometas dejan una estela de polvo, lo que observa cualquier persona desde la Tierra es que los objetos que se desprenden de este cuerpo celeste atraviesan la atmósfera”, precisó el profesor Giovanni Pinzón Estrada, del equipo de trabajo del Observatorio Astronómico de la Universidad.