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Bucaramanga
Viernes 08 de mayo de 2020 - 12:00 PM

Con el fin del Coronavirus vendrá una pandemia mental

De acuerdo con la Asociación Colombiana de Psiquiatría, una vez superada la pandemia del Coronavirus, es posible que empeoren los trastornos de salud mental, incluyendo la ansiedad y la depresión. Consultamos a una Psicóloga Clínica e Investigadora en Salud Mental y Trastornos del Neurodesarrollo, quien aclara el tema.

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Las preocupaciones, la ansiedad y las consecuencias derivadas del COVID-19 pueden ser abrumadoras. El distanciamiento social hace que todo sea aún más complejo, situación que según expertos puede acentuar la depresión y otras dificultades emocionales.

De hecho, además de los problemas sociales cotidianos, Colombia enfrenta altos niveles de maltrato, violencia intrafamiliar y feminicidios, variables que hacen más complicada la situación.

En diálogo con Vanguardia, Haidy Sánchez Mattsson, psicóloga Clínica e Investigadora en Salud Mental y Trastornos del Neurodesarrollo, radicada en Suecia, explica de qué manera se afectaría la salud mental de las personas y qué hacer para cuidarla.

¿Cómo se ha vivido la pandemia en Suecia?

- Hemos pasado por diferentes fases desde que la pandemia se consolidó. Se ha vivido con incertidumbre, con temores y con mucha preocupación. Sin embargo, la pandemia no ha afectado a la población en mayores grados como en otros países, sí se reportan fallecidos, principalmente adultos mayores, pero Suecia decidió desde muy temprano adoptar un modelo de mitigación y control del contagio del Coronavirus basado en la conciencia y responsabilidad colectiva, permitiendo que nunca se pusiera al país en cuarentena.

¿De qué manera el confinamiento afecta la calidad de vida de las familias?

- La pandemia y el confinamiento obligatorio repercute en parte en el bienestar y la calidad de vida tanto individual como familiar, las rutinas de sueño y hogareñas se han invertido y ha provocado que muchas personas sientan que su vida no tiene un norte. Las rutinas tienen la función de ayudarnos a organizar y estructurar nuestras vidas y si se pierden, se pierde el compás diario.

Vivir tantas semanas en espacios restringidos o pequeños y tener a la pareja semanas consecutivas durante todo el día, puede en algunos casos aumentar la irritabilidad y disminuir los niveles de tolerancia, principalmente si las familias ya tenían una dinámica disfuncional. La situación laboral y económica para algunos se ha visto afectada, convirtiéndose en una carga emocional que perjudica el bienestar familiar.

¿Por qué se cree que habrá una ‘pandemia mental’ después del confinamiento?

- Existe preocupación por un posible agravamiento de los problemas de salud mental en las personas, ocasionados por el confinamiento, que se incremente un número clínicamente relevante de personas con estrés leve, estrés postraumático, ansiedad, depresión y que esto desate comportamientos perjudiciales como suicidio y autolesiones, creando implicaciones directas en la vida familiar como abuso doméstico e infantil, riesgos psicosociales y ruptura de relaciones.

A muchas personas no se les ha dejado realizar el duelo de la pérdida de seres queridos durante esta época y esto también podría generar problemas psicológicos más adelante.

Sivigila, en el 2017 reveló que en el país hubo aproximadamente 51.218 casos de violencia física (52 %) y 7.420 casos de violencia psicológica (7 %), cifras altas pero que ahora en el período de cuarentena han ido en aumento.

¿Cuáles son los peligros del deterioro de la salud mental?

- Nos vuelve vulnerables, hace que no podamos afrontar las crisis, no nos permite tener la capacidad de solucionar los problemas adaptativamente, tendemos a interpretar las situaciones de una forma negativa, alarmista y en muchos casos fatalista. El deterioro de la salud mental también nos puede llevar a somatizar, a perder el sueño, a experimentar problemas físicos como estomacales, sudoración, dolores, etc., y esto deriva en más caos en nuestra vida cotidiana y nos vuelve menos productivos.

¿Cómo identificamos que estamos atravesando una situación que compromete nuestra salud mental?

- Los indicadores de deterioro de la salud mental pueden verse de diferentes formas. Hay señales que nos indican que algo no va bien, por ejemplo, cuando experimentamos mal humor, irritabilidad, falta de placer en actividades que anteriormente disfrutábamos, hipersomnia (excesiva necesidad de dormir durante el día), fatiga, ideas suicidas, fragilidad, pérdida de la esperanza, sentimientos de vacíos, pensamientos anticipatorios negativos. Estas son señales de alarma que funcionan como “identificador y chequeador” de nuestra salud mental. Si chequeamos nuestro estado de ánimo, podemos empezar a ser un poco más conscientes de nuestro estado mental y emocional actual y tal vez tratar de hacer algo al respecto.

¿Cómo debemos enfrentar, detener o prevenir un posible trastorno o enfermedad mental?

- Es importante que aprendamos a soltar los pensamientos negativos o “inútiles”, pues estos nos generan emociones desagradables. En psicoterapia utilizamos algunas técnicas como estar en el “aquí y en el ahora”. Estar en el presente nos da poder, y allí aparecen los pensamientos positivos. Cada vez que nuestra mente se desvíe con pensamientos que no nos permiten estar en el aquí y en el ahora, perdemos poder de controlar las situaciones y la resolución de problemas se reduce, por ello, es importante poner en práctica esas técnicas básicas. Además, debemos tener rutinas de higiene mental: dormir bien, comer balanceado cuando se pueda, no consumir alcohol o sustancias psicoactivas, hacer ejercicio y conservar el contacto con nuestros amigos y familiares.

¿Qué cuidados básicos debemos tener para evitar complicaciones en la salud mental por la situación que afrontamos?

- Entrenarnos a estar conectados en el presente, entrenarnos en pensamientos como ¿qué está pasando ahora mismo? ¿Qué estoy viviendo ahora mismo? Enfocarnos en lo que tenemos y poder percibir las sensaciones.

Además, se recomiendan cosas básicas como: salir a caminar o a correr cuando se nos permite o dentro de la casa, hablar con alguien para desahogarse, escoger una zona de desahogo, organizar las ideas, tomarse su espacio, hacer una pausa, desconectarnos, cerrar los ojos, técnicas sencillas de respiración y relajación también son aconsejables. Las técnicas de relajación son de mucha ayuda para mantener la calma y la tranquilidad en épocas de incertidumbre y ansiedad.

¿Es posible salir adelante después de una enfermedad derivada del confinamiento?

- Claro que sí. Las crisis son necesarias, son nuestro “baúl de experiencias” donde podemos confinar estrategias y experiencias para poder afrontar las nuevas crisis que vendrán. De las crisis sale la capacidad de superar las adversidades, de salir renovados todos la tenemos, es lo que se llama resiliencia.

¿Qué tanta importancia debemos darle a la salud mental?

- La salud mental tiene un valor muy grande, debemos verla como la base de la vida de cada uno. Además nos brinda un estado de equilibrio emocional y nos permite interactuar con nuestro entorno en diferentes ámbitos sin mayores inconvenientes, a pesar de las posibles dificultades que se presenten. Podemos alcanzar bienestar personal, pero estando estables mentalmente podemos crear ambientes agradables para las personas con las que compartimos. Es importante porque nos ayuda a enfrentar y afrontar los problemas de la vida de una forma adaptativa y nos ayuda a tener relaciones sanas.

¿Qué tan vulnerables están los colombianos a las diferentes enfermedades de salud mental?

- Colombia ha sido golpeada permanentemente a lo largo de la historia, muchos colombianos llevan en su memoria psicológica el sufrimiento de las generaciones anteriores. Hay comunidades que han vivido y viven sometidas al miedo, desprotegidas por el estado, y amenazadas por diferentes grupos. La larga historia de nuestro conflicto armado interno también afectó notablemente la salud mental de poblaciones enteras. Y si nos remontamos a la época del narcotráfico vemos como ciudades enteras se mantenían en psicosis colectiva. Entonces hay una historia de temor, miedo y sufrimiento, pero al mismo tiempo nuestra historia nos ha hecho fuertes y optimistas, tal vez como mecanismo de supervivencia. Así que considero que existen factores que nos protegen psíquicamente. Como sociedad somos positivos y resilientes. Es muy importante tener una mentalidad positiva, así como saber controlar nuestros sentimientos y estados de ánimo que afloran en estos momentos.

¿Qué podemos hacer en casa para tratar de minimizar un poco la situación?

- Es necesaria la búsqueda de ayuda profesional, es importante filtrar los pensamientos. Uno no debe pensar en todo lo que se le viene a la mente. Hay pensamientos que sin ningún problema pueden dejarse pasar, se pueden elegir los mejores pensamientos. El llamado es a entrenar esas técnicas básicas, con el objetivo de experimentar la calma y no perderla, pues al perderla nos intranquilizamos y llega la ansiedad. En momentos de crisis e incertidumbre el manejo de la calma es de gran ayuda, nos permite tener conductas adaptativas para poder pensar con “cabeza fría” y superar las adversidades.

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Publicado por Claudia Isabel Delgado

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