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Bucaramanga
Domingo 26 de marzo de 2023 - 12:00 PM

La historia de adultos mayores que sirvieron a la patria y ahora labran la tierra en Santander

Viudas del conflicto armado y policías en uso de buen retiro de la institución unieron sus fuerzas para establecer un programa comunitario que hace brotar vida de las entrañas de la tierra.

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Suministrada / VANGUARDIA
Suministrada / VANGUARDIA

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Cerca de 25 mujeres y hombres que hacen parte de un grupo conformado por esposas de uniformados muertos en combate y pensionados de la Policía Nacional se las ingeniaron para crear un programa de cultivo de productos que tiene como trasfondo una terapia de vida, perdón y reconciliación.

Hace cerca de 12 años, estos adultos mayores se propusieron convertir un terreno montañoso de la Finca Asturias de la Policía en Floridablanca en un pedacito del campo en la ciudad.

A pica, pala y azadón, trabajaron la tierra, la abonaron, sembraron frutas, hortalizas y otros productos propios de una huerta orgánica, pero también establecieron proyectos productivos como el cultivo de plátano, cacao, café y aguacate.

Siembran historias y cosechan sueños

Carlos Alirio Contreras es un sargento mayor retirado de la Policía, luego de 35 años de servicio y los seis últimos en el área metropolitana de Bucaramanga.

Además de ser Policía, este hombre también se formó como técnico agrícola y tractorista preparador de suelos, por lo que desde sus inicios, junto a Miryam Villamizar, líder del proyecto, se apersonaron de que de este suelo brotara vida.

“Me siento afortunado de conocer a los adultos mayores que hacen parte da la huerta. Cada viernes compartimos jornadas de trabajo, vivencias de nuestro paso por la institución policial y con las viudas del conflicto conocimos los rigores de la guerra que las dejó sin algunos de sus seres queridos”, expresó Contreras.

El sargento mayor dijo que más que una siembra, esta es una terapia porque “aquí venimos a ver crecer el arbol que sembramos muy pequeño. El dedicarse a que una planta salga adelante ayuda a fortalecer toda la parte mental de nosotros los pensionados. Por eso cada quien tiene una responsabilidad en la huerta”.

Por su parte, María Fanny Galvis es una viuda del conflicto armado. Su esposo falleció por oponerse a un hurto. Tiene 73 años cumplidos y desde los 61 hace parte de este proyecto de siembra. Confiesa que las actividades de la huerta le sirvieron como vehículo de perdón, reconciliación y perdón.

“Cuando llegamos a este terreno no entraba ni la pica, era una tierra muy dura. Sin embargo, nos esforzamos y tenemos un lugar muy acogedor que nos da oxígemo puro, nos permite integrarnos con los compañeros y a su vez celebar la vida de cada uno de ellos. Tenemos personas hasta de 90 años que denuestran que son útiles, que valen mucho. Los lazos de amistad y compañerismo también son la cosecha de este trabajo”, indicó la señora Galvis.

Esta mujer confiesa que la alegría más grande es recoger el fruto de lo que contanto amor sembró, porque “llega el viernes y uno ya quiere salir corriendo a la huerta a ver cómo van sus maticas. Son como hijos o nietos que tenemos alli sembrados”.

Un proyecto único en Colombia

Carlos Alirio Contreras aseguró que este es un proyectó único en el país que integra a la familia policial. Además de las plantas de yuca, aguacate, limón, mandarina, lechuga, habichuela, rábano, cilantro, apio, plátano y piña, entre otros, que se encuentran a la entrada de la finca de Carabineros, los adultos mayores se están formando en temas de agricultura para tecnificar los cultivos.

Se trata de 70 matas de cacao varienad San Vicenye 141, 20 plantas de café variedad Colombia, 60 ejemplares de plátano artón y otros tantos de aguacate con los que tienen planeado un proyecto productivo orgánico y libre de pesticidas.

Cabe destacar que los productos que aquí se cosechan son repartidos entre los integrantes del grupo para abastecer sus necesidades alimenticias. Además, para celebrar ocasiones especiales tienen su fogón de lena en donde el sancocho y las bebidas y postres de frutas, cultivadas allí, son el menú por excelencia.

Precisamente, el pasado viernes, 17 de marzo, los labriegos recibieron dos importantes apoyos. Por un lado, les llegó abono natural producido en el páramo de Santurbán, con el que fortalecerán los cultivos.

En tal sentido, el gerente del refugio Piedra Parada, Nicolás mantilla, indicó que “desde hace cerca de siete meses estamos apoyando a este bonito proyecto. Se trata de abono de ovejas del sector de Berlínel cual compostamos y donamos a los adultos mayores”.

Mantilla Reinaud destacó que “es un abono 100 % orgánico que armoniza con la idea de la huerta. Esta campaña nos parece muy importante porque es un espacio para que los adultos puedan recrearse, trabajar y esto fue lo que nos movió a vincularnos”.

Por otra parte, el comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, general José James Roa, visitó el proyecto y reconoció que “es gratificante como este grupo de hombres y mujeres se unió para establecer un proyecto totalmente orgánico en el que el amor de sus manos hace que den fruto”.

El alto oficial afirmó que “este es un proyecto muy interesante que se puede convertir en punto de referencia para la región. Dispondremos de apoyo de personal de la Policía Metropolitana para la limpieza y expansión de esta Huerta del Envejecer Saludable”.

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Publicado por Milton Velosa Araque

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