De no firmarse en las próximas horas un contrato entre el Municipio y uno de los cementerios de la región, se podría presentar una grave emergencia sanitaria en la morgue de Tuluá por el daño en una de sus neveras.
Así lo dio a conocer Antonio Silva, director de la Regional Suroccidente del Instituto de Medicina Legal, quien dijo que en las neveras de Tuluá permanecen 14 cadáveres desde hace cinco años que aún no han sido reclamados por sus familiares y tampoco se han podido sepultar por falta de un contrato entre la Administración Municipal y una de las funerarias que se encargue de esa función.
El doctor Silva dijo que de no poderse inhumar esos cuerpos en las próximas, lo que generaría una emergencia sanitaria, serían trasladados hasta la ciudad de Cali en donde hay una nevera con capacidad de albergar hasta 30 cadáveres.
Como la nevera de la Morgue de Tuluá se ha dañado en varias oportunidades, los cadáveres que permanecen ahí son trasladados a las morgues de Buga y Palmira y luego regresan a Tuluá, así durante más de cuatro años.
Por su parte, el secretario de Gobierno de Tuluá, coronel (r) Jorge Alexánder Gallego, dijo que este miércoles se publicará en Internet el contrato por $ 90 millones de pesos para darle solución definitiva a esta problemática.
Según el funcionario, ese proceso puede estar culminado en unos 15 días aproximadamente.
“Durante cinco años no se hizo absolutamente nada y esta administración ya destinó los recursos para que esos 14 cuerpos se puedan sepultar”, indicó el coronel Gallego.
En esta ocasión, los cuerpos no se han podido trasladar a Buga porque la nevera de la morgue de ese municipio está en mantenimiento y a Palmira tampoco por la contingencia del Covid-19.
