Publicidad

colombia
Sábado 27 de mayo de 2023 - 12:00 PM

Combustión del suelo en Cerro Bravo no es de origen volcánico y no cesará tan rápido

Expertos en estudios de suelos de la Universidad Nacional de Colombia, Unal, sede Manizales presentan un análisis sobre este peculiar fenómeno.

Compartir
Imprimir
Comentarios
Suministrada /VANGUARDIA
Suministrada /VANGUARDIA

Compartir

Suministrada /VANGUARDIA

Las presentes humaredas en el sector conocido como la Virgen en Herveo (Tolima), que han generado alerta, obedecen a un fenómeno natural del suelo denominado “combustión por materia orgánica”, lo que obligó a suspender el suministro del gas en algunos municipios del Eje Cafetero; aunque el servicio ha retornado gradualmente, aún queda la incógnita sobre cuánto tiempo tardará en apagarse la zona de calor.

Sobre este fenómeno los profesores expertos en el tema afirman que la combustión por materia orgánica no es de origen volcánico. La materia orgánica es una mezcla de sedimentos volcánicos con vegetación que se da con el pasar de los años. Esta se va introduciendo entre el suelo y forma pastizales bajo tierra, no se desintegra por completo para volverse suelo común.

“Una de las particularidades de dicho fenómeno es que las temperaturas han alcanzado hasta los 700 °C –una cifra elevada para casi todo tipo de suelos–, capaz de derretir rocas, por lo que se debe estar pendiente de los laterales de la montaña para prevenir agrietamientos mayores o afectaciones en la vía que propicien taludes”, explica el profesor Eugenio Duque Escobar, experto en geología, geotecnia y movimientos de masa.

Por su parte, Victoria Mejía Bernal, experta en magnetismo y materiales avanzados, con estudios de lavas y paleosuelos, anota que “este fenómeno de combustión latente se presenta debido a una mínima cantidad de oxígeno en la atmósfera, que a pesar de que exista una combustión, no se da como cuando ocurre una quema forestal; en otras palabras, es un incendio subterráneo. Cuando se habla de la importancia de conocer el tipo de suelo y por qué ocurren estas fisuras o agrietamientos”.

Asimismo, Duque, agrega que “tales fisuras o agrietamientos pueden obedecer a un levantamiento interno del suelo, por una acumulación de sedimentos, ya que la montaña de Cerro Bravo está conformada por domos de lava, es decir erupciones lentas de magma viscosa que se van mezclando con los años superficialmente o al interior del suelo formando una especie de capas con la tierra, además de la ceniza que cae y el material vegetal”.

Algo que ratifica Mejía, al mencionar que “el interior del suelo de Cerro Bravo se caracteriza no solo por ser un terreno escarpado sino por contar con la presencia de turbas, es decir materia enterrada compuesta precisamente de ese material orgánico de color pardo rico en carbono, el cual forma una masa esponjosa en la que aún permanecen componentes vegetales y que no se debe confundir con el compost o compostaje”.

Las turbas generan –de forma natural– un proceso de emisión de gases, expulsando nitrógeno, oxígeno, dióxido de carbono, óxido nitroso y metano, este último uno de los principales contribuyentes a la formación de la capa de ozono en el suelo, un contaminante atmosférico peligroso al medioambiente como gas de efecto invernadero.

Por ello se debe considerar que los agrietamientos internos en la montaña obedecen su vez a un efecto de volcanismo fisural que, como su palabra lo indica, se trata de fisuras que se generan de forma natural por la necesidad del volcán en liberar gases acumulados, necesarios ambientalmente para que no existan explosiones.

“Un claro ejemplo de ello son las minas de carbón cuando están expuestas a una concentración alta de metano y el gas no se libera por taponamientos o estructuras para proteger a los mineros, entonces cualquier chispa de una pica puede entrar en reacción y generar una explosión”, menciona el profesor Duque.

Advierte que no es conveniente taponar nuevamente el hueco con más tierra u otro tipo de material, máxime cuando ya se ha determinado que el proceso de combustión se da de forma lenta; tampoco se puede apagar con agua hasta que no bajen las temperaturas y se conozca el origen de dicho enrojecimiento de la materia orgánica.

Por último, la profesora Mejía menciona que “no basta con determinar o predecir en cuánto tiempo se puede extinguir este fenómeno; es importante evaluar si el fenómeno puede darse en otros sectores del Cerro, teniendo en cuenta el principio geológico del uniformismo de James Hutton: el presente es la clave del pasado”.

Elija a Vanguardia como su fuente de información preferida en Google Noticias aquí y únase a nuestro canal de Whastapp acá.

Publicado por Redacción Economía

Publicidad

Publicidad

Tendencias

Publicidad

Publicidad

Noticias del día

Publicidad