El 90,6% de los ocupados estaban afiliados a seguridad social en salud y sólo el 49,9% cotizaban a pensión, reveló el Dane.
Por cada 100 ocupados que se registraron en Bucaramanga y su área metropolitana durante el trimestre móvil febrero – abril de 2021, al menos 56 eran informales laborales, es decir que no cotizaban ni en salud ni en pensión.
De acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas, Dane, de los 524.000 trabajadores registrados en la ciudad durante este periodo, el 56% estaban en la informalidad laboral; es decir, 294.000 personas.
Con relación al trimestre enero-marzo de 2021, cuando la informalidad llegó al 55,8% de la población, se tuvo un incremento de 0,3 puntos porcentuales. Es decir, que en el comparativo intertrimestral hubo un aumento de 12.000 personas a esta condición. Frente al año pasado no hay comparativo, ya que en este tiempo los colombianos estaban en confinamiento y la entidad no hizo la medición.
Para Jaime Alberto Rendón Acevedo, director Centro de Estudios e Investigaciones rurales de la Universidad de La Salle, una solución a la informalidad es el fortalecimiento de la estructura productiva y económica del país.
“Debe existir un cambio de mentalidad frente al cumplimiento de la normativa laboral y empresarial, que nos obliga al trabajo decente, acabar con una disposición que tiene el país que es la manera de abaratar costos laborales, por fuera de la normativa. No se puede trasegar por los caminos de la informalidad para generar reducciones de costos, esto se debe hacer con base en productividad, mejoramientos técnicos, tecnológicos, capacitación del recursos humano y, principalmente, de expansión de las actividades productivas del país”, aseguró el experto.
El 90,6% de los ocupados estaban afiliados a seguridad social en salud y sólo el 49,9% cotizaban a pensión, reveló el organismo.
Además, el 57,6% de la población ocupada pertenecía al régimen contributivo o especial como aportante, el 8,7% era beneficiario y el 23,7% era subsidiado.
Rendón precisó que estas estadísticas alarman “porque lo que hace es que la informalidad del trabajo va a llevar a que la gente al término de su vida laboral no tenga una pensión, no pueda tener un ahorro o las condiciones suficientes para una pensión en su vejez. Lo que va mostrando es que la situación futura de las personas mayores será delicada y nos estamos aproximando a una población envejecida y pobre, y esto no es favorable para el país”, advirtió Rendón Acevedo.
La cotización a la seguridad social, en particular a las pensiones, es un método en el que se puede hacer seguimiento a la informalidad. Aquí las cifras se vuelven más fuertes, ya que solo el 30% de los trabajadores cotizan a una pensión, pero eso no quiere decir que estos trabajadores colombianos se podrán pensionar en su vejez, se calcula que, por efecto del número de semanas y montos (de acuerdo con el sistema al que están afiliados) cerca del 22% de los colombianos se pensionará”, explicó Rendón Acevedo.