Antes los trámites en esta oficina tardaban cinco días hábiles, hoy deben esperar hasta 90 días.
Víctor Manuel Piamonte es asesor de una reconocida inmobiliaria de Bucaramanga. Desde hace casi 20 días está a la espera de levantar una orden de embargo de un inmueble, radicada a mediados de agosto.
Según cuenta Piamonte, en la Oficina de Instrumentos Públicos le dijeron que el trámite tardaba 10 días hábiles, por eso debía regresar el 26 de agosto. Sin embargo, este día no tuvo respuesta y le indicaron que regresara el 13 de septiembre. Dando un poco más de plazo, acudió a las oficinas el pasado 15 de septiembre, pero aunque la orden de embargo ya está en el sistema, deberá volver hoy para cancelarla.
Este es uno de los muchos ciudadanos que se han venido enfrentando a atrasos y demoras en los trámites de esta oficina.
Según algunos denunciantes, realizar trámites como escrituras, levantamiento de medidas cautelares o embargos ante la Oficina de Instrumentos Públicos en Bucaramanga se ha convertido en un verdadero ‘calvario’.
Es tanta la espera que diligencias que tardaban entre tres y cinco días, ahora dan espera de entre 60 y 90 días.
“En el último año se han presentado atrasos y demoras en el levantamiento de las medidas cautelares y el registro de las escrituras, desconocemos el motivo y por eso pedimos a la Superintendencia de Notariado que por favor nos colabore con una auditoría. Queremos saber los problemas internos que se vienen dando en esta oficina”, dijo Álvaro Cartagena, líder del sector Inmobiliario.
Para el sector de finca raíz, es necesario que se incorpore más personal a la oficina, así se podrán agilizar los trámites como el levantamiento de las medidas cautelares y el registro de las sucesiones de las nuevas escrituras, ya que esto viene afectándolos en el desembolso bancario.
“Ante la negligencia que se está presentando, esto afecta nuestros hogares, nuestras familias. Nuestros ingresos se han disminuido en un 60% porque los términos en los créditos bancarios se vencen y es necesario renovar dichos documentos. No se pueden llevar a cabo las hipotecas, los desembolsos”, reiteró Cartagena.
Piden más personal
Esta no es una situación desconocida para los funcionarios de la Oficina de Instrumentos Públicos, ya que reconocen los retrasos que se están registrando en el diligenciamiento de estos documentos, por este motivo solicitan a la Superintendencia de Notariado la contratación de más personal.
De acuerdo con Dehiby Jovany Villamizar, presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores de Notariado y Registro, Sintranore, existe un recargo en las funciones a ejecutar y cuentan con poco capital humano.
“Antes nuestras funciones eran la inspección y vigilancia de notarías y el servicio de registro, pero hoy debemos también supervisar catastros, notarías, curadurías y el servicio de registrar, con menor presupuesto y una planta mermada”, aseguró Villamizar.
“Esto se traduce en insatisfacción de los ciudadanos y demás clientes, que deterioran la imagen de la institución y que deslegitiman la razón de la existencia de este servicio”, precisó Sintranore en un comunicado.