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Nacional
Martes 15 de noviembre de 2022 - 12:00 PM

Análisis: Crecimiento económico empieza a moderarse y a verse una desaceleración, qué está pasando

El Dane publicó los principales resultados de actividad económica para el tercer trimestre del año reportando una expansión anual del 7% y una del año corrido del 9,4%.

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El Dane reveló los principales resultados de actividad económica para el tercer trimestre del año. El crecimiento anual fue del 7% y del año corrido se ubicó en 9,4%.

Sobre estos datos, Jackeline Piraján, economista Scotiabank Colpatria, destacó que el crecimiento en Colombia ha sido bastante positivo frente a los comparativos regionales, incluso mundiales, sin embargo, ya no está siendo tan generalizado cuando lo miramos dentro de los sectores.

"Particularmente, seguimos destacando que la demanda de servicios de entretenimiento, de transporte y también de algunos bienes industriales asociados a eventos masivos como la producción de bebidas y demás son los que siguen jalonando el crecimiento económico de forma bastante dinámica", explicó la analista.

Sin embargo, advirtió que se están encontrando otros capítulos con un grado de moderación y resaltó la caída y la pérdida de dinamismo en la agricultura, actividades de café que han visto producciones más disminuidas frente a procesos previos y otros cultivos que también se han afectado por situaciones climáticas y por alguna elevación en el costo de los insumos.

¿Qué es importante de resaltar? Piraján precisó que, si bien Colombia todavía tiene un buen ímpetu de crecimiento, este se puede ir agotando. De hecho, ya se está viendo en algunos sectores y de cara a 2023 lo que se está esperando es que los hogares moderen un poco su consumo.

"Lo que nos mostró un poco el tercer trimestre es que efectivamente algunos hogares siguieron consumiendo algunos servicios, pero ya dejaron de consumir bienes durables o semidurables como, por ejemplo, los electrodomésticos o incluso la ropa, tal vez preponderando sus gastos básicos", dijo la economista.

Por su parte, Mauricio Hernández, economista de BBVA Research para Colombia, sostuvo que en el tercer trimestre de 2022 la demanda interna completó ocho trimestres consecutivos creciendo por encima del PIB, manteniéndose como la mayor fuente de expansión de la economía.

Además, según Hernández, la brecha entre los crecimientos de la demanda interna y el PIB se volvió a ampliar, luego de que el dato del trimestre anterior mostrara señales de un mejor comportamiento del comercio exterior, que se revirtió rápidamente, determinando una ampliación del déficit exterior neto a septiembre y cargando de nuevo la mayor parte de la explicación del crecimiento en la demanda interna.

"Lo anterior fue una consecuencia de la fuerte desaceleración de las exportaciones (crecieron 30,7% anual en el segundo trimestre y 14,5% en el tercero), al tiempo que las importaciones se mantuvieron con una dinámica sobresaliente (28,9% y 23,3% anual, respectivamente)", puntualizó el economista.

Agregó que, a su vez, las elevadas importaciones respondieron a la mayor dinámica de la inversión fija, que se aceleró desde un 9,8% anual en el trimestre previo hasta un 16,1% anual entre julio y septiembre, presionando al alza las compras externas del país, sobre todo en lo que tiene que ver con el gasto en maquinaria y equipo, con un amplio componente importado.

"Al contrario, el consumo privado se desaceleró, especialmente en el componente de bienes, no tanto en el gasto en servicios, que se mantuvo con cifras de crecimiento de dos dígitos. Sin embargo, esta dinámica de los servicios no fue suficiente para frenar la tendencia de moderación del consumo privado total, el cual fue menor en el tercer trimestre que en el segundo en 2,2%, reflejando el agotamiento progresivo del fuerte ciclo expansivo que viene teniendo el gasto de los hogares hasta ahora", advirtió el analista.

Por sectores económicos, como era de esperarse, el mayor aporte al crecimiento provino de las actividades más relacionadas con los servicios (comercio, transporte y restaurantes y arte y entretenimiento) y la construcción.

Al contrario, el sector agropecuario tuvo una dinámica negativa por el efecto negativo de las lluvias sobre la producción del sector. La industria, por su parte, tuvo un buen comportamiento gracias a la combinación de una demanda interna todavía fuerte y unas exportaciones que, aunque se desaceleraron, conservan tasas de expansión de dos dígitos.

Los sectores de minería (86% de la actividad prepandémica) y construcción (86%) siguen siendo los más rezagados respecto a los niveles que tenían antes de la pandemia, mientras que las demás actividades ya sobrepasan (algunos por amplio margen) esos niveles.

Desempeño de la construcción

Para la presidenta de Camacol, Sandra Forero Ramírez, “a pesar de los desafíos de la economía y la actual coyuntura, el sector de la construcción se mantiene como una actividad productiva destacada con un crecimiento de 13,4%”, además con un renglón de edificaciones que registró una dinámica muy positiva con 19,3%.

Según Forero, “el sector debe seguir siendo visto de manera integral por sus aportes al empleo, el crecimiento económico y, sobre todo, en el acceso a la vivienda y el desarrollo urbano formal; y así las cifras lo evidencian”.

Con estos resultados, el llamado del gremio es a seguir generando condiciones para que la confianza de los hogares y la inversión garanticen la sostenibilidad del sector en el corto plazo; por eso, la construcción de edificaciones debe tenerse muy en cuenta en las actuales discusiones de política económica y las acciones de desarrollo nacional y regional que se emprendan.

Sector financiero

El vicepresidente técnico de Asobancaria, Alejandro Vera, afirmó sobre el resultado del PIB del tercer trimestre: "El crecimiento del PIB del tercer trimestre del 7% es una muy buena noticia para la economía colombiana y está en línea con las expectativas que tenía nuestro equipo técnico de 6,8%. El sector financiero, con 9,2%, fue uno de los que presentó mejor crecimiento, en línea con lo que sigue siendo una buena dinámica de la cartera de créditos".

Proyectó que en el cuarto trimestre y en 2023 se espera una desaceleración del crecimiento de la economía, pero Colombia seguirá teniendo una de las economías más dinámicas de la región y “esperamos que ese dinamismo se traduzca en generación de empleo y oportunidades para los colombianos”.

Jackeline Piraján, economista Scotiabank Colpatria, recalcó que si esta tendencia se repite, lo que se está esperando es que para el próximo año ese consumo en los hogares se modere tanto que lleguemos a crecer alrededor del 2%. El Banco de la República tiene un pronóstico de expansión incluso menor a un punto porcentual y por otro lado es importante seguir observando qué dinámicas trae la inversión.

"Lo que nos mostró ese dato es que se están reactivando o dinamizando sectores relacionados con la construcción de vivienda, la compra de maquinaria y de equipos y falta ver qué puede suceder en adelante para ver de qué forma se recompone el crecimiento económico entre el consumo y la inversión", dijo la economista.

Añadió que, con este resultado, se reafirma su expectativa de que el Banco Central no ha terminado de subir tasas de interés, probablemente haya nuevos ajustes en la reunión de diciembre y en la medida que los consumidores sigan viendo estas señales de mayores subidas en la tasa de intervención junto con una inflación y un dólar altos frente a los meses anteriores, esto conduzca a una moderación del consumo privado haciendo que el próximo año se tenga más bien una transición hacia un crecimiento más bajo.

Asimismo, Mauricio Hernández, economista de BBVA Research para Colombia, añadió que las ventas de vivienda vienen cayendo consecutivamente desde el segundo trimestre de 2022, anticipando una menor actividad de la edificación después del período de preventas. Por lo tanto, se espera que el proceso de moderación de la actividad continúe en el cuarto trimestre del año.

"Esta desaceleración se prolongará por los siguientes trimestres, con lo cual no se pueden descartar períodos con resultados negativos en el PIB durante 2023, cuando el crecimiento económico lo proyectamos en 0,7%".

Resaltó que su perspectiva es favorable para la construcción de obras civiles, las cuales deberán ser impulsadas por la mayor ejecución del presupuesto de inversión que suele ser característica en los últimos años de los períodos de los alcaldes y gobernadores, coincidiendo esto justamente con 2023, año previo al cambio de gobierno en estos entes locales y regionales.

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Publicado por Miguel Orlando Alguero

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