Tocar los precios del combustible es uno de los movimientos más impopulares que puedan ejecutar los gobiernos. En Colombia el valor del galón de gasolina ha subido $1.000 entre octubre de 2022 y enero de 2023. El más reciente incremento fue de $400 y ya varios sectores han mostrado su malestar. De hecho, en días recientes ha tomado fuerza la versión que apunta a un paro de taxistas.
En este contexto, el Plan Financiero presentado por el Ministerio de Hacienda indica que “el déficit del Fondo de Estabilización de Precios del Combustible (Fepc) representa un desafío para la sostenibilidad de las finanzas públicas (...), por lo que materializar acciones y estrategias encaminadas a reducirlo es fundamental (...)”.
Así las cosas, Hacienda informó que “en línea con lo observado desde el mes de octubre de 2022, el equipo técnico prevé que continúe el ajuste paulatino del precio de los combustibles líquidos. De esta manera, se prevé que en 2023 y 2024 la transferencia que realiza la Nación por este rubro sea de 1,7% del PIB (aproximadamente $20 billones), valor que disminuirá (en línea con el incremento de precios contemplado) a 0,5% del PIB en 2025 y 0,1% del PIB en 2026 (aproximadamente $1,1 billones)”.
“Se proyecta que los diferenciales de precios se cierren a comienzos de 2024 para gasolina corriente, y a comienzos de 2025 para diésel, con lo cual el gobierno lograría que la presión de gasto asociada al Fepc desaparezca en el transcurso del cuatrienio”, añadió el Plan Financiero.
Esa presentación permite inferir que el valor de los combustibles seguirá aumentando progresivamente hasta el final del presente gobierno. Pese a esto, José Antonio Ocampo, ministro de Hacienda, sostuvo en días pasados que “incluyendo este ajuste, Colombia sigue teniendo uno de los precios de la gasolina y del diésel más baratos de América Latina gracias al Fepc”.
Siga leyendo: ¿Cuál es la empresa que está ensayando la jornada laboral de 4 días a la semana?