Ecopetrol anunció en la mañana de este lunes 11 de septiembre una serie de ajustes en su Estrategia 2040.
Estos cambios estratégicos, aprobados por la junta directiva, reflejan según la petrolera su compromiso con la adaptación a un entorno energético en constante evolución.
Fin al ‘fracking’ en Colombia. En este punto, la petrolera colombiana confirmó su decisión de no desarrollar la actividad de exploración de hidrocarburos en yacimientos no convencionales, conocida como ‘fracking’, en Colombia.
Esta medida, según la empresa, muestra un compromiso con la sostenibilidad ambiental y la protección de los recursos naturales del país, respondiendo a preocupaciones públicas y garantizando prácticas energéticas más responsables.
No obstante, hay que recordar que el negocio de fracking de Ecopetrol en EE. UU. ya supera los 50.000 barriles por día y es uno de los que más crece en ingresos en dólares para la compañía.
Por último, Ecopetrol dijo que se reemplaza el objetivo estratégico de Eficiencia Energética por optimización del consumo interno de energía en 25 petajulios (PJ) acumulado al período 2018-2030.
Se espera que el presidente de la empresa, Ricardo Roa, amplíe detalles de este cambio en la estrategia más importante que tiene la empresa y que contempla su desarrollo futuro.
En su declaración oficial, Ecopetrol enfatizó en que la Estrategia 2040 reafirma su compromiso con una transición energética justa y equitativa.
Esto significa que la empresa está dispuesta a adaptarse a un mundo en rápido cambio, buscando diversificar su portafolio sin sacrificar la integridad y el valor de su negocio tradicional.
Académicos de Santander consultados por Vanguardia afirmaron que esta decisión tanto del Gobierno nacional como de Ecopetrol era de esperarse ante la política gubernamental de no al ‘fracking’.
Asimismo, indicaron que en esos pilotos hay reservas potenciales de aproximadamente 7 mil millones de barriles, eso es 3,5 veces la reserva actual de petróleo, lo que daría una estimación de 20 años de reservas, mientras que en gas se habla de 8 mil giga pies cúbicos, equivalente a un aumento dos veces más de las reservas actuales de gas.
Lea también: Ecopetrol toca la campana en Bolsa de NY y presenta cambios en su Estrategia a 2040
A dos debates de convertirse en ley de la República se encuentra la prohibición del ‘fracking’ y los yacimientos no convencionales en Colombia.
El Gobierno Petro, con su Ministerio de Ambiente, se ha encargado de liderar esta iniciativa y ratificó su posición sobre la protección del agua, el suelo y los ecosistemas del país.
“Lo que debemos hacer es descarbonizar, no ampliar la oferta con prácticas inciertas. Tenemos siete años para reducir las emisiones en un 45 %. Es un efecto acumulativo, si no reducimos las emisiones no hay ventana de oportunidad y no podremos cumplir con el Acuerdo de París; con el ‘fracking’ no lo lograríamos”, recalcó en su intervención la ministra de Ambiente, Susana Muhamad.
Además, Muhamad aseguró que “el ‘fracking’ no afecta la economía. Esto no estaba proyectado en las cuentas fiscales del Gobierno Nacional, por lo que no habrá ningún tipo de riesgo económico”.
También el ministro de Minas y Energía, Omar Camacho, indicó que este Gobierno se ha propuesto superar la dependencia de los hidrocarburos.
“En el diseño de la política que tenemos para más adelante, el uso del ‘fracking’ no es una opción”, dijo el funcionario.
Brigitte Baptiste Ballera, bióloga colombiana y rectora de la Universidad EAN, cuestionó la postura del Ministerio de Ambiente. “No hay pruebas, solo supuestos. Se suspendieron los proyectos piloto. Se invoca mal el principio de precaución. Se usan las sospechas ambientales para atacar el capital corporativo. ¡Mejor ir directo contra la gran empresa sin sacrificar la ciencia para eso!”.
Proyectos pilotos
Hay que recordar que el ‘fracking’, también conocido como fracturamiento hidráulico en yacimientos no convencionales, es la técnica con la que se realiza la inyección de un fluido compuesto por agua (91 %), arena (6 %) y aditivos químicos (3 %), a alta presión, para extraer hidrocarburos que están contenidos en la roca generadora.
Ante este panorama, desde noviembre del 2022, Ecopetrol se adelantó y comenzó el proceso para deshacer los contratos de proyectos no convencionales en Colombia, entre ellos el ‘fracking’.
El primer piloto se llama Kalé, que cuenta con un presupuesto de inversión de 76 millones de dólares, de acuerdo con la petrolera estatal. En ese caso particular, el 27 de marzo del 2022, la Anla aprobó la licencia ambiental para este proyecto.
El segundo piloto se llama Platero, operado por Ecopetrol y ExxonMobile. Tiene una inversión de 56 millones de dólares.
Los dos proyectos contemplan la realización de operaciones en Puerto Wilches (Santander).
Estos contratos buscan adelantar la técnica ‘fracking’ para encontrar información científica, social, ambiental, técnica y operacional, que después le puede servir al Estado para desarrollar la política de yacimientos no convencionales.
Le puede interesar: ¿Qué pasará con la factura de la luz? Precio de la energía en bolsa superó los $1.000 por kilovatio en Colombia
Periodista económico en Vanguardia. Magíster en Estudios Políticos, de la Universidad de Caldas. Comunicador Social – Periodista, egresado de la Universidad Pontificia Bolivariana. De La Guajira.
malguero@vanguardia.com