domingo 26 de febrero de 2023 - 12:00 AM
Casa Harsha
En esta casa podrá encontrar chocolate de mesa 100% cacao sin azúcar; uchuvas deshidratadas recubiertas en tres capas de chocolate amargo; y barras de chocolate del 63 %, 71 % y 80 %, con frutas y especias.
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Suministrada/Vanguardia
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Ana María Meneses Marín convirtió su hogar en la casa de la felicidad, el chocolate amargo, el arte y la literatura. Esta idea nació como una tienda en línea que ofrecía a los santandereanos productos saludables hechos con cacao. Pero además, con el impulso y alma de empresaria que Ana María siempre ha considerado tener. Luego de haber ejercido como profesional en comercio exterior, durante mucho tiempo, decidió emprender su propio camino.
En 2018 encontró en el cacao su proyecto de vida. “Quise sacar lo mejor de sus propiedades, tanto para la salud física como la salud espiritual. Busqué un endulzante que no fuera tan nocivo y luego de investigar di con la panela orgánica certificada”. Gracias a ello logré definir el concepto de su marca: productos saludables en los que el cacao sea el componente principal, pero ricos al paladar. Lo llamó Cacaolate.
Tras el éxito de sus productos, y con la oleada de emociones que dejó la pandemia, Ana María consideró que su proyecto debía ampliarse. Fue cuando, en octubre de 2022 inauguró Casa Harsha. “Harsha quiere decir felicidad en sánscrito, entonces esta es la casa de la felicidad y el chocolate amargo, porque por su alto contenido de teobromina, estimula la creación de endorfinas, la hormona de la felicidad”.
En esta casa podrá encontrar chocolate de mesa 100% cacao sin azúcar; uchuvas deshidratadas recubiertas en tres capas de chocolate amargo; y barras de chocolate del 63 %, 71 % y 80 %, con frutas y especias.
Además de ser parte de una amplia y acogedora comunidad, podrá disfrutar de bebidas calientes y frías se podrá unir a las tertulias literarias, que ocurren dos viernes al mes; a los eventos de poesía y hasta a un grupo de mujeres.
En la carrera 25 #37-38, donde está ubicada Casa Harsha, las puertas están abiertas de martes a viernes, de 2:30 p.m. a 7:00 p.m. para todos aquellos que quieran ser parte de esta comunidad con vida y afín al arte y la literatura. Es en definitiva, y como Ana María lo describe, un sitio mágico. “Todos los que vienen dicen que se respira una energía impresionante. Puede ser dada por el nombre, por el chocolate, o por las personas que vienen acá. Algo que también es clave es que todo lo hago desde el corazón”, comenta.
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Fernanda Sandoval
Periodista egresada de la Universidad Autónoma de Bucaramanga. Miembro de Vanguardia desde 2020. Actualmente soy reportera de las secciones de Tecnología, Entretenimiento y Cultura, y apoyo en la elaboración de contenido digitales e impresos. Lidero el proyecto Vanguardia Kids, una plataforma multicanal en la que los niños de 8 a 14 años son los encargados de contar historias.
msandoval@vanguardia.com
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