Emmanuel Esparza acaba de terminar su segundo protagónico en Colombia, en el famoso remake de la serie estadounidense Nip/Tuk, “Mentiras Perfectas”, cuando un Pipe Vallejo se le acercó a la salida de un teatro y le presentó un guión para una película de acción. Vallejo quería que Esparza fuera su protagonista.
Y a pesar de que en un primer momento Emmanuel pensó que hacer este thriller era una locura, se enamoró del proyecto y siguió adelante para ver la película hecha realidad. Diez años después, hoy ha sucedido: “Qué corre por tus venas”, un thriller rodado por completo en Tolima, llega a las salas de cine del país para mostrar que es posible una cinta con un formato hollywoodense que nos refleje, también, como sociedad.
La ópera prima de Pipe Vallejo, dramaturgo, actor, productor y director nominado en las categorías a Mejor Director de Ficción, Mejor Libreto de Ficción (original o adaptación), y Mejor Miniserie de Ficción por su obra Camisa de Fuerza en los Premios India Catalina 2023 que se realizarán en Cartagena el próximo 26 de marzo, llega con las actuaciones de Lina Restrepo, Jhoffer Racines, Diana Mendoza, Luis Fernando Salas y Marco Tostado y con el soundtrack de Andrés Cepeda.
La cinta narra cómo unos glamurosos y apuestos estafadores internacionales deciden dar su último gran golpe en Latinoamérica, haciendo creer al mundo que el objetivo será una jugosa cantidad de dinero; pero la realidad es otra.
Vanguardia habló con Emmanuel Esparza acerca del proceso de la película, su personaje y su carrera.
En varias entrevistas ha dicho que es difícil hacer cine, ¿cuál fue el proceso de la película?
“Es bonito que le podamos contar al público colombiano que no es del medio lo complicado que es hacer una película cuando no tienes detrás a un canal, una plataforma, inversor o productor de cine importante. Para mí es súper importante que la gente sepa el esfuerzo titánico que significa llevar a cabo una película del cine buscando la financiación propia como ha hecho Felipe. No es ninguna tontería el hecho de mencionar que la primera vez que yo tuve noción de este guión fue hace 10 años”.
¿Cómo es su personaje?
“Una de las cosas más bonitas a la hora de interpretar, por lo menos en mi caso como actor, es investigar sobre sobre los diferentes comportamientos humanos, que podemos llegar a hacer las personas las cosas más bonitas del planeta o las peores cosas que se han creado en este mundo.
Así somos los humanos.
Y eso es lo que más me interesa. “Hollywood” es un tipo que está rayando entre el bien y el mal. Es una persona que de esas que tiene el carisma, la inteligencia y el arrojo para estar viviendo siempre por encima de lo que está socialmente bien establecido, quiere estar siempre por encima utilizando su inteligencia.
Además, el hecho de poder compartir este personaje con actores colombianos en una película en la cual no se utilizan los temas recurrentes del país. Cuando haces una película intentas evaluar la historia que quieres contar y lo que quieres transmitir con tu historia, sabiendo que esto sigue siendo un negocio. Intentas minimizar los riesgos y por eso en el cine siempre vemos películas de terror, comedia romántica o Avatar, que es lo que gana en el cine hoy en día.
Y tener ‘las narices’ de plantarte con una película de acción y una historia de amor en una película con ese presupuesto y en un rodaje que no podía superar las cinco semanas es una combinación muy loca”.
En cierto momento sus papás estuvieron preocupados porque escogió ser actor, ¿al hacer esta película creyó que podían tener razón?
“Sí, lo he dicho muchas veces: esta carrera no es para todo el mundo. Y lo digo desde el fondo de mi corazón: no es una cuestión solamente de talento o de suerte, es una cuestión de tener muy claras tus ideas en la vida y saber la odisea que vas a tener que pasar para poder convertirte en un actor que pueda vivir de esto. Te tiene que gustar mucho y tienes que tener, primero, la preparación, segundo, la pasión para seguir soñando cuando las cosas se pongan complicadas... ¡Porque se van a poner complicadas! Y, tercero, un caparazón de acero en la espalda porque te van a venir golpes y negativas de muchos lados.
Es normal que la gente que más te quiera en este planeta, que son tus papás, te pregunten si estás preparado para una cosa así.
A mí me encanta escribir y de hecho la carrera que colmaba todas mis inquietudes era la de publicidad por el tema de la creatividad. Hacía cortos con mis amigos, pero la carrera de publicidad dejaba a mis padres un poco más tranquilos.
Pero al final el universo pone las cosas en su sitio: terminé mi carrera, me puse a hacer una pasantía en una agencia de publicidad y a los dos meses dije: no es por aquí y dejé mi vida soñada en Valencia y me fui a Londres a ‘poner’ desayunos para poder estudiar guión cinematográfico. Nada más terminar, de vuelta en Valencia, hice mi primer casting y me escogieron.
Y eso es una cosa que no es normal. Hice dos o tres series seguidas, me fui a Madrid a mi primer casting a nivel nacional en España, que fue la versión de Betty la fea, Yo soy Bea y cuando me di cuenta ya tenía en mis espaldas más de 700 capítulos de televisión en una cuestión de cinco años.
Es curioso porque incluso con eso mis padres seguían viendo esas series como algo: bueno, este chico no vemos clara su carrera. Pero cuando Elena Elena Arnau es la directora de casting de Sergio Cabrera en España para sus proyectos en España me llama a ‘La Pola’ y cuando mis padres se vienen desde Valencia a verme a Colombia y estoy encima de un caballo con 600 cañones, ahí realmente me quedo mirando a mi papá y él hace un gesto de: ahora sí”.
¿Cómo ha sido su relación con Colombia?
“Ya lo he dicho varias veces y no me voy a cansar de decirlo, creo que hay una relación de amor absoluto, que la conexión mía con el público colombiano fue directa desde el principio. Miro atrás y ni yo mismo me doy cuenta de la carrera tan alucinante y tan bonita que he podido hacer en un país que no es el mío, pero que ya considero mío, mi segunda casa.
Nunca dejo de estar pendiente de lo que se hace en España y en estos años he tenido la oportunidad de volver para hacer series importantes: Secretos de Estado, que está en Amazon Prime, Servir y Proteger, de Televisión Española, pero donde me siento realmente cómodo y respetado, que es lo quiere un actor sentir, es en Colombia: más de 78 proyectos como protagonista con los dos canales más importantes y tiene que ver con el cariño del público colombiano”.
Volviendo a su personaje, ¿en qué momento se ha sentido entre el bien y el mal?
“No te puedo contar exactamente en qué momento, se lo voy a dejar a la imaginación de los lectores, pero cuando volví de Londres tuve una época bastante compleja: era muy joven y la noche confunde mucho, como se dice. He tenido momentos bastante complicados en la noche tanto valenciana como madrileña, en la noche de Ibiza.
He tenido momentos complejos en los que me he dicho ¡wow! Esto por aquí no es. En aquel momento piensas que te lo estás pasando muy bien y muy divertido, pero la vida no puede ser estar todo el rato en ese punto de adrenalina, a punto de cagarla. Eso es mejor dejarlo para los personajes de televisión.
Me he dado cuenta de que está bien vivir ciertas cosas, también soy una persona que piensa que está bien mirar para atrás y decir estuve ahí, pero hay cosas muchísimo más importantes en la vida que esos momentos de adrenalina, de vivir al límite y me gusta muchísimo ese momento de vida en el que miro atrás y sonrío ante esas locuras, pero no las echo de menos en absoluto.
Hay muchas veces que no se sabe qué es lo que se quiere, pero una de las cosas más importantes en la vida es ir sabiendo, qué es lo que quieres, estar tranquilo sabiendo qué es lo que quieres y yo me siento justo en ese momento”.