¿Qué hace cuando su vida está ‘patas arriba’ y, por más que trata, no logra volver a ponerse de pie? ¿Ha pasado por esas? ¿Acaso hoy está atravesando por una situación en la que todo le ha salido al revés?
Si es así, tome las cosas con calma. Todo se logra con paciencia, perseverancia y esfuerzo, so pena de ahogarse en el ‘mar’ de la frustración.
Recuerde: su mundo no es perfecto y, en cierta medida, le corresponde entender esa inexorable ley.
Lo ‘bueno’ de pasar por tales afugias es que, cuando las cosas le están saliendo mal es porque, en cierta forma, la vida misma le está advirtiendo que debe hacer uno o varios cambios.
Por ejemplo, es probable que deba hacer una autoevaluación sobre lo que ha hecho, lo que ha dejado de hacer o lo que está haciendo en la actualidad.
Tal vez le sea preciso reflexionar sobre las expectativas que tiene con su propia realidad. Con seguridad, está en mora de hacer ajustes que le permitan volver a asumir el control de su vida.
No se quede esperando que la vida sea totalmente fácil porque no sólo se puede llevar más de una desilusión, sino que además podría estrellarse contra el mundo entero.
¿Qué hacer cuando los problemas le mueven el piso?
Obviamente debe desenredar todos los líos en los que esté involucrado, para que pueda encontrar la tranquilidad que necesita.
En ese orden de ideas, es fundamental entender que las cosas importantes no son complicadas sino complejas y, si lo analiza bien, cada momento que usted ve como un problema, en el fondo, no es otra cosa que un llamado de la vida a sacudirse y a salir de su zona de confort.
Por más que se sienta embolatado con las vicisitudes, no permita que esa confusión le altere la motivación. Si se deja obnubilar por los problemas, en vez de aclarar su situación, se hundirá cada vez más.
Si aprende a ser objetivo, franco y sencillo con usted mismo, verá todo más claro y, sobre todo, descubrirá que más allá de la oscuridad será capaz de lograr cosas que antes no imaginaba que podría alcanzar.
Claro está que debe prepararse para librar batallas en beneficio de los ideales y principios que considere válidos. Eso sí, tendrá que ponerse manos a la obra y actuar con justicia y equidad. Su esfuerzo será compensado con creces.
Una última recomendación: no se anticipe a los hechos si quiere que algo le salga como realmente lo desea. ¡Dios le ayudará, pero Él se toma el tiempo que considere necesario para bendecirlo!
EL CASO DE HOY
Testimonio: “Mi estado de ánimo se encuentra por el piso. No me han salido algunas cosas y eso me tiene algo frustrado. A veces quiero alejarme de todo el mundo y no volver a tener contacto con nadie de mi entorno. ¿Qué me puede estar sucediendo? Deme su consejo. Gracias”.
Respuesta: Eso que experimenta suele ocurrirnos a muchos. No obstante, por lo que interpreto entre las líneas de su carta, su vida está como las fases de la luna: con menguantes y crecientes.
¿Qué le quiero decir? Que más allá de que en algunos momentos sienta disminuir sus fuerzas, no se puede apagar. Si se levanta y persevera, le vendrá el renacer de sus energías y todo saldrá bien.
Cuando se levante ‘bajo de nota’ y lo único que desee sea alejarse de todo y de todos, tenga presente que tiene derecho a hacerlo; es decir, puede darse el lujo de apartarse un rato. Sin embargo, no porque se desaparezca se le irán los problemas. Tenga claro que si aplica una dosis de entusiasmo será capaz de afrontar y limpiar adecuadamente ese manto gris que lo envuelve.
Puede ser que sea una época de virajes inesperados y, aunque no lo entienda hoy, el destino lo está obligando a repensar el presente y, por ende, el futuro.
Aprenda a aceptar el momento que vive para sacar de él el máximo provecho. Derribe las barreras para que pueda verse tal como es usted y para que entienda realmente lo que está sucediendo con su vida.
Tome la iniciativa de volver a empezar y verá que, con decisión, Dios le bendecirá. Si enfoca desde una perspectiva resiliente sus problemas, los resolverá de una manera más diligente.
REFLEXIONES CORTAS
* Cuando se equivoque, cuando no se cumpla lo que usted mismo se prometió, cuando no pueda sonreír, cuando no logre ser el mejor o cuando el resultado sea distinto al que esperaba... ¡perdónese! Siempre puede recomenzar. ¡No cargue con culpas injustas, en la vida real suceden cosas reales!
* El arte de dejar atrás los problemas para seguir adelante se llama ‘super..arte’. Si cayó, levántese. Después de un fracaso tiene la oportunidad de volver a intentar ese objetivo por medio de otro plan de acción. No se dé por vencido ante el primer obstáculo y siga persiguiendo aquellas cosas que tanto anhela.
* Hay tesoros escondidos en su corazón que, si los descubre, le darán la felicidad. No busque por fuera lo que realmente yace en lo más profundo de su ser. Más allá de las circunstancias, dentro de usted se encuentra la esperanza para motivarse y seguir su camino. ¡Mire hacia arriba!
Periodista de Vanguardia desde 1989. Egresado de la Universidad Autónoma de Bucaramanga y especialista en Gerencia de La Comunicación Organizacional de la Universidad Pontificia Bolivariana. Miembro del equipo de Área Metropolitana y encargado de la página Espiritualidad. Ganador del Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar.
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