Cuando pensamos en bloqueador solar, muchas veces lo asociamos a los meses de mayor sol. Sin embargo, el bloqueador solar es un producto necesario en tu rutina de piel que deberá ser usado todo el año.
Existen varios tipos de radiación solar (radiaciones electromagnéticas emitidas por el sol) que traspasan la capa de ozono, los más conocidos son los rayos UVA y UVB, pero también existen los rayos infrarrojos IR y la luz azul, todo ellos pueden causar daños acumulativos e irreversibles en la piel causando enrojecimiento y quemaduras, oscurecimiento de la piel, manchas y pecas, arrugas y por último cáncer de piel.
Los rayos UVB penetran en menor medida, pero causan daños directos en la piel como quemaduras y hasta cáncer de piel. Los rayos UVA forman radicales libres y causan un daño indirecto en la piel provocando foto envejecimiento (las famosas arrugas). Es por esta razón, que cuando buscamos un bloqueador solar este debe indicar que es de amplio espectro y que proteja contra todos los tipos de radiación, UVA y UVB, IR y luz azul.
Los rayos solares causan envejecimiento prematuro de la piel lo que se traduce en pérdida de firmeza y elasticidad, favoreciendo la aparición de arrugas.
El Factor de Protección Solar o FPS es otro punto importante a tener en cuenta al escoger un bloqueador. Generalmente recomiendo un mínimo de SPF 50 en meses de verano. Teniendo un SPF 50 o 100, recuerden siempre reaplicar el bloqueador cada 2 a 3 horas en meses de verano y cada 3-4 horas en meses de invierno; un ejemplo de bloqueador que contiene amplia cobertura, pues protege de los cuatro rayos solares (la luz azul es del espectro solar pero es luz visible), es el Total Block de Yanbal, experto en cuidado de la piel, que tiene un FPS de 100, y gracias a su UV MAX Technology protege en gran porcentaje contra los rayos dañinos del sol (UVA, UVB), rayos IR y luz azul.
Cuando usamos el bloqueador solar de manera correcta podemos disminuir el riesgo de varios tipos de cáncer de piel y ayudamos a prevenir el envejecimiento prematuro de la piel. El melasma, por ejemplo, es una enfermedad de la piel común que generalmente aparece en el rostro y es causada por la exposición crónica al sol. Son manchas oscuras en el rostro, generalmente en fototipos altos, que se agravan en los meses de verano. El melasma es difícil de tratar, por eso hay que prevenirlo a tiempo con el uso perene del bloqueador.