A los bumangueses les gusta Francia: la experiencia del reconocido director Miguel Borrás, que triunfa en el exigente mundo del teatro francés y de la docente Judith Alexandra Vásquez, quien logró en 2021 su nacionalidad francesa, muestra el interés por vivir allí. Estos son los consejos para lograrlo.
Vinos, quesos y cine francés: vivir en el llamado “país del amor” es una meta para muchos bumangueses. Sin embargo, lo cierto es que el francés, si bien hermoso, requiere compromiso para aprender y, no vamos a mentirnos, no todo es como en “Emily en París” (la famosa serie de Netflix).
Judith Vásquez García llegó a Toulouse en 2012 para cursar una maestría en Arte y Comunicación, y se quedó a vivir en Francia. En 2021 obtuvo su nacionalidad, así que ya es una ciudadana colombo-francesa.
Los franceses son estrictos en sus horarios y códigos culturales, además de serlo en sus cuestiones administrativas, por lo que adaptarse a sus formas es fundamental.
Y, por supuesto, cómo sobrevivir al inclemente frío.
“A todo aquel que quiere venir a Francia o a Europa les digo que la paciencia es la clave de todo porque la cultura es completamente diferente en muchos aspectos, la comida, el transporte, todo es muy diferente y por supuesto el clima: en Francia y toda Europa tenemos estaciones”, comenta Judith, quien tiene 33 años.
Es por eso que ella ofrece sus consejos, con base en su experiencia de 10 años viviendo en Francia, para tener una buena experiencia:
Lo primero es aprender muy bien francés. Si ya tiene claro que quiere iniciar de estudios en el exterior, específicamente en Francia, por ejemplo, lo principal es la lengua: en Francia es muy importante francés. Los franceses están muy orgullosos de su lengua y es un aspecto clave para el éxito académico, pero también para la inserción profesional.
Si quiere vivir en Francia tiene que saber que la cortesía es muy importante y así puede soportar los cambios de clima. En Francia hay estaciones y es importante informarse de cada. En invierno se llega a un grado centígrado, por lo que no se pueden olvidar los guantes, el gorro y, por supuesto, hay que usar la técnica de la cebolla: vestirse con prendas una encima de otra. La primera capa debe ser térmica. Por otro lado, si se trata del otoño, es bueno llevar siempre sombrilla porque llueve mucho y no vale al pena resfriarse.
Además, la gastronomía es diferente. En Francia, las comidas suelen acompañarse con agua y con vino y es importante estar abierto a probar comidas como el queso y el L’apéro, el aperitivo, que es un parte fundamental de la cultura francesa y que se comparte con una copa de vino antes de comenzar el almuerzo o la cena. Es importante que estar abierto a probar y a hacer parte de este tipo de tradiciones.
Asimismo, los franceses están muy orgullosos de su baguette o pan francés y tienen la tradición siempre de acompañar las comidas con este pan.
Otro consejo para vivir en Francia es que tenga muy presente la normas de cortesía. Siempre se saludan, se despiden y agradecen. Y algo muy curioso: el ritual del beso para saludarse. Los franceses se dan un beso en cada mejilla, ese es el ritual del saludo francés. Y dependiendo de la región, se pueden dar incluso hasta tres.
