Sergio Rincón, el bumangués que hizo parte del Multiverso de locura del Dr. Strange

Vanguardia habló con el bumangués Sergio Rincón acerca de su vinculación con Dr. Strange, Multiverse of Madness, con su pasión por el diseño de efectos especiales y por su vida en Estados Unidos. Foto suministrada/VANGUARDIA ‘Matrix’, ‘StarWars’, ‘Inception’: hay algo en los efectos visuales que nos maravilla y que a la vez se nos escapa. Solo los “iniciados”, los genios, los amantes de crear universos de fantasía que parecen reales cuando los vemos en el cine son capaces de descifrar es especie de magia. Y Sergio Rincón es uno de ellos. Estudió durante años y trabajó duro hasta lograr vincularse con el sueño dorado de los amantes de los efectos especiales: Hollywood. “Una vez finalizada mi maestría en Estados Unidos tuve la oportunidad de trabajar en tres películas independientes, que fueron mis primeros créditos cinematográficos. Después de terminar mi carrera armé un ‘reel’, que es una recopilación de mis mejores trabajos, más unos proyectos personales, y apliqué a diferentes estudios. Fue en una época difícil, de pandemia, en donde no estaban contratando, sino reduciendo personal. Hasta que tuve la oportunidad de empezar a trabajar para un estudio en Los Ángeles”: este es la forma en la que Sergio Rincón dio el gran salto que separa el anhelo del logro. La palabra mágica (que en realidad de magia tiene muy poco, pero sí mucho de trabajo arduo) es perseverancia: incluso en época de pandemia, cuando en casa recluidos muchos solo esperaban que un poder mayor se encargara de todo. Pero entonces, las películas con sus efectos especiales y de animación lograron transportarnos a mundo que, al liberarnos por un momento de la tensión y la incertidumbre, nos permitía continuar. Vanguardia habló con el bumangués Sergio Rincón acerca de su vinculación con Dr. Strange, Multiverse of Madness, con su pasión por el diseño de efectos especiales y por su vida en Estados Unidos. Así comenzó todo Sergio Rincón vive en Nueva York hace casi dos años, trabajando de manera virtual para un estudio con sede en Montreal. Dice que lo que más le gusta de la ciudad es la diversidad cultural y de oportunidades para hacer formar y hacer parte de una comunidad. El diseñador bumangués es integrante de una asociación llamada ‘Visual Effects Society’ desde el año pasado, lo que le dio la oportunidad de participar en una proyección especial de la película ‘Dune’, y donde también estaba el director de la cinta, Denis Villeneuve, y el coordinador de sonido, Hans Zimmer. “Es muy interesante estar en Nueva York por todas las oportunidades, los eventos. Aquí se concentran muchas cosas relacionadas con con mi trabajo”, cuenta. En 2018, Sergio Rincón resultó beneficiario del programa de crédito-beca de Colfuturo para estudiar una maestría en animación y efectos especiales en la Academia University en San Francisco, Estados Unidos. Fue haciendo este trabajo que logró vincularse con la cinta “Uncharted”, que se estreno en febrero de este año y que es protagonizada por el actor en ciernes Tom Holland, además del ya reconocido Mark Wahlberg. A partir de entonces, su éxito fue en asenso: fue llamado para hacer parte de Dr. Strange, Multiverse of Madness, realizando previsualizaciones, a través del estudio de animación Perception. Además, tuvo la oportunidad de volver a trabajar en la cinta un tiempo más tarde en un rol diferente: realizando “motion graphics”, específicamente en la secuencia de “Los Iluminati”: unas visualizaciones de un circuito cerrado de televisión futurista, una escena trascendental en la cinta. ¿Y cómo llegó hasta allí? Sergio Rincón estudió Diseño Gráfico en la UDI (Universidad de investigación y desarrollo de Bucaramanga) y después de eso estuvo un tiempo trabajando como diseñador gráfico en Bogotá. Trabajó también en Chale, del grupo Samsung, y luego regresó a Bucaramanga para estudiar Tecnología en animación 3D en el Sena. “Para mí ha significado muchísimo porque no es solamente la parte profesional, sino que ha sido un proyecto de vida en base a cumplir mi sueño de niño, que era trabajar en las películas. Cuando obtuve el crédito-beca, además de eso tuve que vender todo lo que tenía, dejar a mi familia, a mi país y arrancar e iniciar una nueva vida desde cero en un lugar donde nadie me conocía, donde todo lo que sabía, toda la experiencia que había tenido o las referencias que pudiera tener, ya no contaban. Ha sido un proceso largo y difícil, pero gratificante”. ¿Qué fue lo más interesante de trabajar en Dr. Strange, Multiverse of Madness? “Es una película muy especial para mí porque tuve la oportunidad de trabajarla en dos estudios diferentes realizando dos roles completamente distintos. En el primer estudio trabajé aproximadamente cinco meses en la película y en el segundo trabaje más o menos un mes: estuve un total de seis meses trabajando en esta producción. “Por ser mi primera película de Marvel, una película muy taquillera, fue impresionante ver cómo se grababan todas las tomas, todos los ‘shots’ en fondo verde y empezar a trabajarlos. “En el primer trabajo tenía que remover el fondo verde e integrar todos los elementos generados en el computador para crear una imagen final y en el otro tenía que crear unas proyecciones ocelográficas. Fue muy interesante trabajar en estas tomas con estos actores que son tan conocidos y en una producción de un alcance muy grande”. ¿Cuál fue el reto más grande que tuvo al trabajar en esta cinta? “En este tipo de producciones es bastante exigente el nivel de calidad y también los tiempos son un poco cortos. Tuve que ser más pulido, tenía que realizar el trabajo de acuerdo con los tiempos exigidos en el estudio. Fue bastante exigente porque en ese momento era la segunda película en la que trabajaba, tuve que aprender a ser más detallista y a trabajar con unos tiempos un poco más apretados”. ¿Cómo nace la pasión por el diseño? “La pasión por el diseño nace viendo películas. Siempre me apasionó mucho el tema de los efectos especiales y quería trabajar en algo relacionado con esto. Lo que encontré un poco más relacionado en Bucaramanga fue el diseño gráfico. Empecé por mi cuenta a aprender un poco de software de edición de video y después entré a la universidad. “Aprendí un poco de retoque de fotografía y de ‘Motion Graphics’, busqué tutoriales en línea, aprendí ‘After Effects’ y a desarrollar ‘Motion Graphics’ en 2D. Busqué información sobre animación en 3D y conocí un software que se llama Cinema 4, también a través de tutoriales. “Todo esto me llevó a ir creando un portafolio a base de proyectos personales y con éste conseguí, mi primer trabajo en una productora en Bogotá y una agencia de publicidad. Fui buscando más información relacionada con el tema de la animación 3D y decidí estudiar en el Sena para aprender más sobre el flujo de trabajo en 3DS, sobre modelado, texturizado, iluminación. “Después de que aprendí todo esto apliqué al programa de crédito beca y eso me abrió las puertas atrás para estudiar en el exterior y, una vez que estudié en el exterior, se me abrieron un poco las puertas de trabajar en la industria de Hollywood”. Cuéntenos sobre la experiencia de estudiar en el exterior “Estudié una maestría en animación y efectos especiales en la Academy of Art University, en San Francisco, Estados Unidos. Es una maestría de dos. Adelanté materias y la terminé en un año y medio. “Tuve excelentes profesores, con más de veinte años en la industria. Algo que me gustó mucho de la Universidad es que tienen un programa que se llama ‘Estudio X’, que permite a los estudiantes hacer prácticas laborales en películas reales en los últimos semestres, así pude trabajar en películas independientes y obtener mis primeros créditos cinematográficos. Fue algo que me ayudó mucho a la hora de conseguir mi primer trabajo. “Todas las bases y lo que había aprendido en Colombia era un conocimiento de alta calidad y que me había servido mucho para el proceso venía adelantando”.