EL crimen por el que lo señalan, ocurrió el pasado 13 de agosto en la carrera 16 con calle 63 del barrio Los Olivos en el sector de La Trinidad, límites entre Floridablanca y Bucaramanga.
Más de un mes después del asesinato de Víctor Fernando Álvarez Acosta, de 35 años, la Policía capturó al presunto homicida, un joven de 21 años, en el barrio Belencito, en Floridablanca.
El hombre era requerido por el Juzgado Segundo Municipal de Garantías de Bucaramanga, por el delito de homicidio agravado, tráfico, fabricación y porte o tenencia de armas de fuego.
El crimen ocurrió el pasado 13 de agosto, al parecer, por problemas familiares. Con todas las pruebas en su contra, el capturado se allanó a los cargos y fue cobijado con medida de aseguramiento en centro carcelario.
De acuerdo con el relato de testigos, Víctor Fernando recibió dos tiros en la cabeza cuando salía a trabajar como mototaxista en el sector de La Trinidad.
Eran aproximadamente las 5:30 de la mañana, cuando salió a recoger sus primeros pasajeros. Siempre acostumbraba a salir por la parte de abajo del barrio en límites con Belencito, pero debido a que lo habían amenazado, desde varias semanas antes salía por el sector de La Trinidad... El agresor le seguía los pasos.
Un joven conocido como ‘C Pequeño’, con quien tenía problemas personales, lo esperó con un hermano. Apenas llegó a la vía principal le dispararon.
“Él salió de las escaleras y caminó un poquito. Le hicieron el primer tiro, luego corrió unos metros y el segundo se lo hicieron casi en la esquina. Ahí quedó tirado” contó un residente de la zona.
Amenazado.
“No voy a descansar hasta verlo en un ataúd” le habría dicho ‘C Pequeño’ a Fernando días atrás, incluso el pasado 7 de julio en Belencito lo había correteado con una navaja y por fortuna en una casa lo dejaron esconder. Luego llegó hasta su vivienda y le hizo dos disparos mientras estaba en la puerta. Por fortuna no le pegó ninguno, pero lo quería muerto y ese 13 de agosto no falló.
“El problema se inició porque el hermano de ‘C Pequeño’ era esposo de mi sobrina, la hermana de Fernando. Ellos se separaron y él tiene una nueva esposa; le querían quitar el ranchito donde mi sobrina vive con los hijos. Entonces Fernando se metió a defenderla y desde ahí empezaron a amenazarlo”, contó una tía de la víctima.
La familia intentó poner las amenazas en conocimiento de la Fiscalía, pero según dicen, no les recibieron la denuncia.
El día del crimen, la policía capturó al otro presunto homicida.
En lo corrido del año la Policía Metropolitana ha capturado 130 personas por el delito de homicidio, con esclarecimiento del 50% sobre este delito, que es superior a la media nacional que está en el 34%.
