De acuerdo Nisson Alfredo Vahos Pérez, secretario general de la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de Bucaramanga, Cdmb, en el allanamiento se descubrió que la sangre, material fecal y vísceras de los animales sacrificados eran vertidos directamente al río de Oro.
La Seccional de Investigación Criminal y Judicial, Sijín, con el acompañamiento del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, Invima, y la Cdmb realizaron un operativo en un matadero ilegal de caballos, mulas y burros en el corregimiento Bocas.
Según, la Coordinadora del Grupo Élite Ambiental, GEA, al llegar al lugar se habían sacrificado a seis equinos y la carne se encontraba en el suelo. Además, se encontró 1,2 toneladas de carne y 10 toneladas de hueso empacado en sacos, que iban a ser comercializadas en el área metropolitana de Bucaramanga.
En el lugar las autoridades capturaron a una persona y decomisaron un vehículo que transportaba a los animales y la carne. Cinco personas más se fugaron del lugar.
A su vez, la funcionaria comentó que se decomisó 400 cueros en proceso de curtiembre, que iba a ser vendido para la fabricación de bolsos, correas y zapatos.
En el sitio también se encontraron aproximadamente a 260 animales encerrados en delicadas condiciones de salud. Sin embargo, las autoridades no se llevaron a los equinos del matadero ya que no hay espacio disponible para tener a todos.
A su turno, las autoridades sellaron el lugar por no cumplir con las normas ambientales y de higiene, así como la carne fue quemada.