El estado y salud emocional es indispensable para tu sano desarrollo. Por eso, es importante que aprendas a conocer tus emociones y a decirles a las personas importantes de tu vida, cuanto las quieres.
La educación, los buenos modales, las habilidades artísticas o la formación deportiva son temas por los que generlamente se preocupan tus padres, y esto es importante porque quieren que te conviertas en un niño destacado y aprendas cada día. Sin embargo, hay algo valioso que no puede dejarse a un lado: el amor y las muestras de afecto.
Pero, ¿qué son las muestras de cariño? Son expresiones con las que puedes demostrar cuánto aprecias a alguien. Estas van mucho más allá de dar un regalo; por ejemplo, tus padres expresan amor a través de gestos y palabras: con besos, abrazos, o con regalos para reconocer tus cualidades o logros escolares. En esta edición te contamos más sobre las demostraciones de afecto y la importancia de expresar amor a tus seres queridos.
¿Cómo hacerlo?
Las palabras: la clave está en saber cómo decirlas y en qué momento. Para expresar el afecto no hay nada mejor que decir “te quiero” o “te amo”, si se trata de los padres, así como “eres importante para mí”, “me importa lo que te pasa” y “me encanta pasar tiempo contigo”. Estas palabras llenarán de alegría no solo el corazón de quienes las escuchan, sino también el tuyo.
El poder de los dibujos: si tu fuerte no son las palabras, mientras trabajas en ello puedes hacer un dibujo deseando lo mejor a tus seres queridos en este momento de dificultad, recordándoles que los quieres. Puedes dibujar el último viaje juntos o un recuerdo especial.
Los detalles: los regalos dados con amor siempre son bien recibidos, pero recuerda que ellos no suplantan para siempre las demostraciones de afecto. Esto te ayudará a expresar tu cariño y la otra persona sabrá que realmente sabes lo que le gusta, y se sentirá especial.
La confianza y los secretos: compartir secretos con alguien es una forma importante de decirle que confías en él y que para ti son importantes sus consejos y recomendaciones.
Comportamientos ejemplares: acciones como ayudar en las labores del hogar, compartir una tarde de cocina en familia, arreglar tu cuarto o ayudar a tus hermanos en sus tareas es otra forma de decir “te quiero y te apoyo”.
La psicóloga y pedagoga Celia Rodríguez Ruiz nos da cinco claves para expresar el afecto:
1. Emplea las muestras de cariño y no te limites por el qué dirán.
2. No reprimas las muestras de afecto ni te obligues. En ocasiones, de pequeños nuestros padres nos pedían dar un beso y en otras ocasiones nos decían que no era el lugar apropiado. Entiende tus sentimientos y reconsidera a quién quieres demostrar afecto.
3. Prueba con detalles. No pienses solo en los gestos, acompáñalos con palabras o detalles para esa persona; o incluso una acción que sabes que le gustará.
4. Confía en tus padres, ellos te ayudarán a encontrar una explicación a las emociones nuevas que aparecen en tu vida. No te apresures a entenderlo todo, no está bien ni mal lo que sientes, solo debes dejar fluir tus emociones.
5. No hay nada que temer, demostrar o recibir amor no es motivo para avergonzarse. Decir “te quiero” es una forma valiente de expresarle a alguien que es importante para ti, piensa que puedes alegrar el día de muchas personas con solo dos palabras.
¡BINGO! Diviértete entendiendo tus emociones
Diviértete con un juego para entender tus emociones y así poder expresar tu afecto a las personas más importantes de tu vida. Haz tu propio bingo emocional y comparte en casa con tu familia. Recuerda que siempre está la opción de conectarse virtualmente con los amigos para compartir también con ellos, por ahora, desde la distancia.
1. Toma una hoja de papel, dóblala por mitades para conseguir recuadros pequeños. Corta los recuadros para hacer tarjetas. Si quieres puedes utilizar cartulina.
2. Utiliza recortes de revista, o imágenes de internet, de personas expresando diferentes emociones. Luego, pega estas imágenes en las tarjetas.
3. Escribe una lista de las emociones correspondientes en pedazos de papel y luego guárdalos en un frasco. Reparte las tarjetas a los jugadores, y pide que las organicen en forma de cuadrado para empezar con el bingo.
4. Saca , uno a uno, los papeles del frasco, y si un jugador tiene esa emoción en algunas de sus tarjetas, deberá cubrirla con este papel.
5. El primer jugador que complete una línea vertical horizontal o en diagonal, podrá gritar ¡bingo!
