Publicidad

Mundo
Lunes 27 de mayo de 2019 - 12:00 PM

Nuevo Parlamento

El surgimiento del voto joven y ecologista se ha expresado claramente con la elección de los nuevos representantes que se sentarán en el Parlamento Europeo. Se impone la tendencia proeuropea y de centroderecha.

Compartir
Imprimir
Comentarios

Compartir

Europa despertó ayer con una nueva realidad: el fin del bipartidismo, tendencias y visiones políticas muy diversas de un continente que mira al futuro con cierto recelo, a medida que avanza en un proceso de integración y unidad que le ha resultado esquivo.

Un proyecto común europeo que se construye a golpe, con la crisis económica de 2008, el drama de los refugiados, el referéndum sobre el “Brexit” en Reino Unido, el gobierno de Donald Trump en Estados Unidos y los efectos de los euroescépticos.

Los resultados de las elecciones parlamentarias, celebradas durante cuatro días, arrojan la Eurocámara más liberal, joven y ecologista de su historia, y el ascenso de la extrema derecha, aunque menor de lo que se creía.

En cambio, un desgaste de los dos grandes grupos tradicionales de centro, populares y socialistas, que perdieron 40 escaños cada uno, tras reinar por cerca de 40 años como mayoría en el hemiciclo europeo.

La nota destacada de la jornada la constituye la alta votación de los electores de los 28 países del bloque, logrando la mayor participación en una elección europea de los últimos 20 años.

Los vencedores indiscutibles fueron los socialistas de España, a la cabeza del primer ministro Pedro Sánchez, que obtuvieron casi un 33% de votos. Es un hecho que la victoria catapulta a los socialistas españoles a un mayor protagonismo en la Unión Europea, UE, como la primera fuerza en la Eurocámara, al hacerse a 178 escaños de un total de 751, seguidos de los socialdemócratas con 152 y los liberales, 108.

También el Partido Verde Europeo y la ultraderecha francesa de Marine Le Pen, la italiana de Matteo Salvini y la húngara de Viktor Orbán así como el partido del Brexit de Nigel Farage, en Reino Unido, consiguieron un buen resultado.

Un continente dividido

Al analizar los resultados, Mauricio Reyes, profesor de Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional, considera que Europa “sigue dividida y en matrícula condicional permanente frente a los nacionalistas antieuropeos y las extremas”.

A su juicio, “el resultado desde lo nacional es muy diverso, en España el elector prefiere una opción más de centro, mientras en Italia y otros países como Hungría o el este alemán acuden a la radicalización”.

Reyes insiste en que falta consolidar partidos con un objetivo europeo, como el recientemente fundado Volt de Alemania, para mantener y consolidar la unidad europea.

Se refiere a la derrota de las fuerzas que concentraban la mayoría en el órgano legislativo, el Partido Popular Europeo y los Socialistas y Demócratas como producto de “la expresión de la diversificación, atomización y radicalización de la propia política moderna a nivel mundial”.

Si bien es un momento histórico, porque habrá un nuevo equilibrio de poder en el Parlamento Europeo, Reyes opina que la duda que se plantea es si este fenómeno es “mera antipolítica o una nueva política, o si hay matices de las dos cosas”.

Saca a relucir, por otro lado, que la lógica es que “el elector europeo apoye la integración, ahora que China les respira en la nuca”.

Clima de incertidumbre

Sin embargo, hay mucha incertidumbre y miedo y los partidos que representan ideologías liberales se quedan sin sustento, observa Cristian Gómez, profesor de Relaciones Internacionales y Derecho Internacional de la Universidad Industrial de Santander, UIS.

Basa este argumento, en que “las personas acuden a quienes les puedan representar ideas del pasado, como la seguridad, la protección del mercado interno, restricciones a la migración”.

Incluso dice que el golpe al bipartidismo al seno de la Eurocámara se explica en que definitivamente “existe un pluralismo ideológico donde ninguna se impone por sí sola, y obliga a las diferentes fuerzas a hacer alianzas”. Es decir, se inaugura una era de coaliciones más amplias.

Ahora bien, menciona que por el momento se calma un poco el euroescepticismo (que se opone a la integración de la UE), pues se esperaba que estas fuerzas ocuparan un 33% de los escaños y llegaron a 25%.

No obstante, aclara que su fuerza está al interior de los Estados. al avanzar el partido del Brexit, pone aún más presión a los partidos tradicionales en Reino Unido.

También le puede interesar: La derecha tensiona a Europa

Elija a Vanguardia como su fuente de información preferida en Google Noticias aquí y únase a nuestro canal de Whastapp acá.

Publicado por Ángela Castro Ariza

Publicidad

Publicidad

Tendencias

Publicidad

Publicidad

Noticias del día

Publicidad