Se estima que hasta 70.000 cristianos están encarcelados en el país en Corea del Norte.
Según un reciente informe del Departamento de Estado de Estados Unidos sobre la libertad religiosa en Corea del Norte, una familia completa, incluyendo a un niño de dos años, ha sido condenada a cadena perpetua por poseer una Biblia.
Esta información se basa en los hallazgos de dos organizaciones: Korea Future, una ONG dedicada a investigar y luchar por la justicia en Corea del Norte, y Puertas Abiertas, una ONG que evalúa la persecución de los cristianos en todo el mundo. Ambas organizaciones han documentado numerosos casos de encarcelamiento, tortura y trato inhumano hacia aquellos que se oponen a la censura religiosa impuesta por el régimen.
El incidente en cuestión ocurrió en 2009 y pone de manifiesto la extrema represión que enfrentan aquellos que intentan ejercer su derecho a la libertad religiosa en Corea del Norte. Lamentablemente, el informe no proporciona información detallada sobre la situación actual de la familia.
Sin embargo, expertos en la materia señalan la necesidad de que se realicen acciones internacionales para abordar y defender los derechos humanos en Corea del Norte, a la luz de casos tan impactantes como este.
De acuerdo con el informe, se estima que hasta 70.000 cristianos están encarcelados en el país, lo cual refuerza la preocupación y la gravedad de la situación. Las organizaciones defensoras de los derechos humanos continúan denunciando estas violaciones y exigen medidas concretas para poner fin a esta triste realidad.
