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Diva Criado
Viernes 05 de noviembre de 2021 - 12:00 PM

Crisis climática, el cambio está en los detalles 1

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A veces tengo la impresión que no somos conscientes del lugar que pisamos. Creemos que la naturaleza es inagotable, que los informes sobre el clima y sus impactos futuros no requieren cambios drásticos en el comportamiento Humano. La naturaleza no nos necesita, nosotros a ella sí. Dada la óptica individual, cada quien tiene un enfoque distinto en torno a un mismo hecho y actúa en consecuencia. ¿Por qué nos interesa saber lo que pasa en Glasgow?

La Cumbre Climática número 26 (COP26) nos interesa a todos, porque nos afecta a todos sin excepción. En la COP26, el compromiso es mantener vivo el objetivo de 1,5°C. El aumento de temperaturas de 2,7°C del planeta a finales del siglo, provocará, según expertos, efectos más devastadores que los que ya golpean a los países de todo el mundo. Con el cambio climático, los desastres serán cada vez más frecuentes e intensos.

No estoy convencida de si estas cumbres cumplen el objetivo por el que se promueven. Entre otras cosas, porque si bien han servido para conseguir un ligero cambio de actitud en la sociedad, poderes económicos y políticos de algunos países desarrollados, que crean políticas de compensación financiera a países en desarrollo, no consiguen resolver el problema de fondo, si ese cambio, les afecta directamente el bolsillo.

Llaman la atención los diferentes enfoques a la crisis del cambio climático. En el discurso inaugural Boris Johnson comenzó pidiendo a los líderes y delegaciones, tener “creatividad, imaginación y voluntad” para cambiar el rumbo del planeta. “Falta un minuto para la media noche del reloj del fin del mundo y debemos actuar ahora. Si fracasamos nuestros hijos no nos perdonarán...”.

Johnson acordó con los líderes mundiales poner fin a la destrucción de los bosques, detener y revertir la perdida de árboles. Sin embargo, ha sido acusado de ignorar convenientemente el presunto daño causado por la Central de biomasa Drax, que quema pellets de combustible hechos de madera procesada, para el suministro eléctrico del Reino Unido. La mayoría de estos árboles provienen de proveedores que están en los bosques de países bálticos, especialmente de Letonia. La empresa ha sido acusada en varias ocasiones de infracciones de sostenibilidad en algunos de los bosques más importantes de Europa. Gran Bretaña seguirá produciendo electricidad a partir de la quema de 25 millones de árboles al año. Advierten los científicos que el “combustible verde” de Drax produce más carbono que el carbón y que, aunque la energía se trata como renovable, en gran parte porque los árboles quemados se replantan, indican que los árboles jóvenes tardarán décadas, sino siglos, en revertir el daño causado al medio ambiente.

El Panel Intergubernamental del cambio climático estima que la deforestación es uno de los mayores impactos con efectos negativos para el medio ambiente. La pérdida del hábitat de millones de animales y plantas que habitan los bosques no sobreviven a la deforestación.

La próxima, más...

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