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Diva Criado
Viernes 28 de agosto de 2020 - 12:00 PM

El rey emérito

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Durante décadas, el rey emérito de España, Juan Carlos I, gozó del respeto y la consideración de los españoles. Sin embargo, las graves y persistentes acusaciones de corrupción, lo han puesto en el ojo del huracán, haciendo tambalear el futuro de la monarquía y, por ende, el reinado de Felipe VI.

Juan Carlos I de Borbón fue proclamado rey en 1975, a la muerte de Franco. El relevo al frente del gobierno tras la salida del presidente Adolfo Suárez, creo una profunda crisis política y económica. Un grupo de guardias civiles, que quisieron poner fin a la monarquía parlamentaria y a la transición democrática, fraguaron un intento de golpe de estado en febrero de 1981.

El papel que jugó el emérito y su desempeño para desactivar el golpe militar fueron fundamentales en el período de transición, razones suficientes para ganarse el respeto de muchos españoles que se consideran más juancarlistas, que monárquicos.

Pero, el velo que parecía hacerlo intocable se desvaneció. Esa gratitud y la autocensura que lo protegió de críticas y miradas indiscretas a su vida personal, salpicada de amantes, a pesar de la reina Sofía, durante más de cuarenta años, hicieron mella cuando la prensa decidió romper esa especie de pacto de silencio sobre la monarquía y salieron a la luz, hechos que comprometían gravemente su descarado desdén por la legalidad.

No son un secreto los amoríos del emérito con Corinna Zu Sayn-Wittgenstein, la empresaria alemana de origen danés, que ha destapado sus oscuras intimidades financieras cuando dieron por terminada la relación sentimental y lo tiene en la mira de la justicia de varios países por blanqueo de capitales.

Pero su vida, también está llena de anécdotas. Después de su abdicación, lo de “emérito” le hacía poca gracia, el enfado que mostró, cuando un periodista en una rueda de prensa en marzo del 2018, se dirigió a él llamándolo “emérito” ha hecho historia: ¡Por qué no te callas? Le dijo con violencia y continuó hablando. «Soy Juan Carlos, no emérito. ¿Ya os habéis olvidado de mí joder, si he sido rey hasta antes de ayer? Que mala memoria, este país es así, abandonas la primera línea y caes en el olvido. Si me llamarais José Carlos, todavía lo podría entender, pero ¿emérito? ¿De dónde habéis sacado ese nombre?».

Después de haber abandonado violentamente el recinto, el rey emérito volvió a los 15 minutos y dirigiéndose a los que allí quedaban dijo: «Ya me han explicado un poco, lo de emérito. Lo siento mucho, me he equivocado, no volverá a ocurrir».

O quién no recuerda aquella frase de “Por qué no te callas”, que dijera al entonces presidente de Venezuela Hugo Chávez, en plena cumbre iberoamericana en Chile en 2007.

Tras la huida de España, el emérito pasó, de ser héroe de la transición democrática a abandonar el país por los escándalos, dejando en una situación complicada a todos los miembros de la familia real, incluso a doña Sofía.

¡Ahí les dejo!

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