Gran preocupación del General Francisco de Paula Santander fue la de crear y fomentar la instrucción pública. Dispuso la Escuela Preparatoria de Medicina en Bogotá, regentada por médicos franceses e ingleses. Constituyó la Sociedad Filantrópica con el objeto de propagar el sistema Lancasteriano. Estableció la Escuela Nacional de Enseñanza Mutua
La visión futurista de Santander lo llevó a formar y preparar profesores y maestros para la enseñanza primaria. Estableció las Escuelas Normales de las Provincias. Rescató la Biblioteca de la Expedición Botánica y aumentó la Biblioteca Pública Nacional. Fundó el Colegio de Boyacá, la Escuela Náutica de Cartagena, las Escuelas Primarias en todo el país, el Colegio de San Gil, el Colegio San Simón de Ibagué, la Escuela de Primaria en Honda, el Colegio Seminario de Popayán, el Colegio de Medellín, en la Villa socorrana la escuela Lancastereana.
Debo hacer mención especial al Colegio Provincial de Pamplona, en el que estudié por algunos meses. Regentado entonces por los Hermanos Cristianos, era un colegio internacional. Colombianos y venezolanos compartíamos las aulas, al unísono cantábamos los himnos e izábamos las banderas de las dos repúblicas y compartíamos con los vecinos, un Colegio que sigue adelante con sus programas educativos.
El Istmo de Panamá, como parte de Colombia, no estuvo ausente de los planes educativos. El Colegio San Bartolomé abrió sus puertas al estudio de la medicina. El Colegio de Ordenados, el Colegio en Puente Nacional, el Museo y Escuela de Minería, el Colegio de Santa Librada en Cali, en Santander de Quilichao, Escuela de Minas, Escuelas de Primeras Letras, Colegio José Eusebio Caro de Ocaña, en Valledupar, el San José de Guanentá de San Gil, el Universitario de Vélez, escuelas en Neiva, Villavieja y Yaguará, Colegios en Guayana, Cartagena, Mompós, Santa Marta y muchos más en todo el país.
Cabe preguntarnos, qué hace actualmente nuestro gobierno departamental frente a las actuaciones del General Santander en su época.
