El cuestionado exgobernador de Santander logró el nombramiento de su esposa como UTL en la Cámara de Representantes y gestiona con el gobierno Petro el nombramiento de su sobrina en Restitución de Tierras.
A pesar de estar inhabilitado para ocupar cargos públicos al haber sido condenado en dos ocasiones por la Corte Suprema de Justicia y haber estado varios años en la cárcel, el exgobernador de Santander, Mario Camacho Prada, no ha dejado de ostentar poder político regional en cuerpo ajeno.
Ya sea desde el Partido Liberal, en el que a comienzos del siglo se consolidó como uno de sus principales dirigentes en la región, o actuando de manera independiente, Camacho Prada ha logrado mantener su poderío en el departamento en interpuesta persona, poder que incluso ha tomado fuerza en el actual gobierno de Gustavo Petro.
Aunque en las pasadas elecciones presidenciales, Mario Camacho apoyó públicamente la candidatura de Rodolfo Hernández, rival político del hoy presidente Gustavo Petro, el pasado martes, 15 de noviembre, la Presidencia de la República en su portal web publicó la hoja de vida de Janeth Tatiana Abdallah Camacho, sobrina del cuestionado exgobernador, quien sería nombrada como próxima directora territorial de la Unidad de Restitución de Tierras en Norte de Santander y Arauca.
Abdallah Camacho viene de ejercer un cargo en la Defensoría del Pueblo en Santander. Así mismo, entre 2018 y 2020, Tatiana Abdallah se desempeñó como defensora de familia en el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar en Santander, entidad controlada políticamente desde hace varios años por el exmandatario departamental.
“Las tres credenciales en la Cámara, que Camacho ostenta con los representantes de la Liga de Gobernantes, le han permitido tener poder de negociación con el Gobierno Nacional, lo cual muy seguramente influyó en la designación de su sobrina”, concluye el politólogo santandereano Gerardo Martínez, consultado por Vanguardia para analizar el caso.
El poder de Camacho Prada no se limita únicamente al Gobierno Nacional. También se extiende al Congreso de la República, más exactamente a la Cámara de Representantes, donde la representante por la Liga, Erika Tatiana Sánchez, su ahijada política, nombró a Nilsa Pilar Castro Salcedo, esposa del exmandatario, como miembro de su Unidad de Trabajo Legislativo en grado VIII, la máxima denominación de una UTL en Congreso, devengando $18 millones mensuales.
Aunque el nombramiento de Nilsa Pilar Castro como UTL de la representante Suárez estaba listo desde el pasado 20 de julio, la polémica suscitada en su momento por la llegada de la esposa de Camacho detuvo provisionalmente el nombramiento de Castro Salcedo.
Mientras Erika Tatiana nombraba a su esposa dentro de su Unidad de Trabajo Legislativo, Mario Camacho logró que la Cámara de Representantes le otorgara el contrato 1931 de 2022 a Nilsa Castro con el fin de “prestar servicios profesionales como ingeniera de mercados en la estructuración económica de estudios del sector y de mercado de los procesos de selección que requiera adelantar la división jurídica de la Cámara de Representantes”.
Dicho contrato fue suscrito por valor de $60 millones, y debía ser ejecutado en cuatro meses, es decir, $15 millones mensuales.
Las recientes movidas políticas y comentarios en círculos regionale apuntan a que el exgobernador Camacho, tras su salida de la cárcel, no solo ha logrado recobrar poder a través de terceras personas sino que estaría organizando un nuevo movimiento político.
Varias fuentes cercanas al exgobernador confirmaron a Vanguardia que Camacho estaría liderando la conformación de un nuevo grupo político, tras el vacío jurídico que dejó Rodolfo Hernández al renunciar a su curul como senador y líder de la oposición al gobierno Petro.
Según las fuentes, tras las diferencias con Hernández, Camacho pasó a coordinar políticamente a los tres representantes que tiene actualmente la Liga: Erika Tatiana Sánchez, Juan Manuel Cortés y Marelen Castillo, con el fin de radicar ante el CNE una solicitud de escensión de la Liga de Gobernantes Anticorrupción y de paso solicitar la personería jurídica de un nuevo partido político que incluya a los tres congresistas.
“En el caso de la representante Marelen es un poco más complicado pero viable jurídicamente y es que el Estatuto de la Oposición señala específicamente que es una organización política, no una persona, la que debe ocupar y ejercer la oposición, con la renuncia de Rodolfo y la con la clara exclusión de Marelen en la conformación de los estatutos de la Liga, está claro que ella puede pedir que se le otorgue personería jurídica como partido político para poder cumplir a cabalidad con el Estatuto de Oposición. En ese partido estarían Erika y Juan Manuel”, explicó uno de los asistentes a la reunión celebrada semanas atrás en Bogotá.
Esta Redacción intentó comunicarse con el exgobernador Mario Camacho pero no contestó llamadas ni mensajes.
