El actual ministro de educación rompió su silencio sobre el sistema de salud. Dijo que dará discusiones internas.
Pese a reconocer que se metería en problemas por no apoyar al Jefe de Estado –quien además es su jefe–, el ministro de Educación, Alejandro Gaviria, salió a contradecir la afirmación del presidente Gusatvo Petro en la que aseguró que Colombia tenía uno de los peores sistemas de salud del mundo.
Gaviria fue contundente: “Yo creo que eso no es verdad. El sistema de salud de Colombia bajo ningún indicador es uno de los peores del mundo”.
Pero la contradicción interna va más allá de eso. Gaviria es una de las voces más expertas del actual Gobierno en temas de salud, pues precisamente se hizo conocido como ministro de esa cartera del entonces presidente Juan Manuel Santos.
De hecho, se sabe que al interior de la Casa de Nariño hay una relación tensa entre el ministro Gaviria y la actual ministra de Salud, Carolina Corcho, quien sí ha apoyado al presidente con la retórica de que el país tiene un “pésimo sistema de salud”.
Pero, menos de 24 horas después de que él hiciera esa afirmación, se conoció un ranking del medio The Economist en el que el sistema de salud de Colombia se ubicó como uno de los 10 países más inclusivos del mundo.
De hecho, indicadores internacionales reconocen a la nación como una de las que mejor sorteó la pandemia. Bloomberg, por ejemplo, publicó una lista denominada resiliencia covid con los mejores y peores manejos de la pandemia. Ahí, Colombia fue la mejor de América Latina en la contención y manejo del virus y ocupó la posición número 12 a nivel mundial.
Por datos como esos es que Gaviria, quien siempre ha sido un defensor del Sistema de Salud, decidió romper su silencio y contradecir a Petro. Aún así, aseguró que las demás discusiones sobre la reforma a la salud “se darán a nivel interno, como deben ser”.
Por ahora, se sabe que ni las EPS ni buena parte de los sectores políticos están de acuerdo con esos cambios. En entrevistas con este diario, las directoras de Acemi y Gestarsalud –que agremian a las EPS del régimen contributivo y subsidiado, respectivamente– coincidieron en que la solución no es acabar con las EPS y que, hacerlo, podría generar más desigualdad.
En eso último coincide también el exministro de Salud del gobierno de Iván Duque, Fernando Ruiz, quien ha advertido que convertir las EPS en pólizas de seguro, como propuso Petro, llevaría a privilegiar a los que más tienen.
Por ahora, el tema de la Reforma a la Salud promete ser una de las mayores piedras en el zapato del Gobierno Petro, pues está demostrado que hasta los alfiles de sus propias filas pueden no estar dispuestos a ceder en temas fundamentales en los que son expertos.
Aún sentándose codo a codo en los consejos presidenciales en los que asisten todos los ministros, a Gaviria y Corcho no se les ve cruzar palabra o simpatizar en conceptos básicos sobre salud, en los que ambos son expertos.
La afirmación de Petro
La polémica por el sistema de salud empezó hace tres semans durante un evento en Aracataca, Magdalena, en el que el presidente estaba lanzando su nueva política pública de salud.
Con la idea de enviar equipos médicos a las zonas más alejadas del país, Petro también empezó el desmantelamiento del sistema tal y como lo conocemos y arrancó con un proyecto mucho mayor que él y Corcho han defendido desde el programa de Gobierno: acabar las EPS.
Según dijo Petro, Colombia no solo tiene “uno de los peores sistemas de salud del mundo”, sino que “fue uno de los 20 peores países en resistir la enfermedad del covid”.
