En una entrevista que dio a El País, de España, el saliente ministro de Educación, Alejandro Gaviria, reveló que dentro del Gobierno Petro hay una urgencia por sacar las reformas, ante el temor de que pronto estalle una coalición en el Congreso, y estas no pasen por el poder Legislativo.
Han pasado 11 días desde que el presidente Petro anunció su salida en medio de una alocución. “Quería ser ministro, sacar la reforma a la ley de educación. Pero esa historia quedó trunca”, dijo el exministro Gaviria a El País.
De entrada este medio internacional le preguntó si se están ante una nueva etapa del Gobierno con la crisis de Gabinete, las reformas sociales, el regreso a la calle y el deterioro de la imagen en las encuestas, a lo que Gaviria afirmó que sí, pero para él es difícil decir que hay un quiebre.
“Es algo más gradual. Veo la agenda legislativa del año como una gran prueba para el Gobierno. En un semestre que suele dominar el Plan de Desarrollo, el Ejecutivo ha propuesto un montón de regulaciones de la actividad privada como el código minero o el de transporte. Es demasiado ambicioso. Mi instinto liberal me lleva a preocuparme más por la calidad que por la cantidad de los cambios”, señaló en la entrevista para este medio digital escrito.
También le preguntaron sobre cómo es el Gobierno Petro por dentro y el reveló cuatro particularidades.
La primera tiene que ver con una Presidencia de muy poca gente. “Es un error tener un presidente sin presidencia”. La segunda particularidad, para Gaviria, es la tensión entre la tecnocracia, los mandos medios de los ministerios y el presidente.
“Él es un visionario que ve los temas desde muy arriba. Por eso las discusiones del Consejo de Ministros son muy generales, con intervenciones muy largas del presidente y después una lluvia de ideas. Cecilia y Ocampo me decían que se me notaba la ansiedad. Me ponía a escribir en la libreta, me salía al baño”.
Como tercero está el Gobierno de coalición, “pero no discutimos”. Y cuarto, en los temas económicos el presidente Petro ha sido responsable.
El exministro de Educación, además, señaló que hay que darle crédito al presidente, que es consciente de la necesidad de estabilidad macroeconómica.
“No quiero demeritar a Ocampo, pero Petro aceptó aumentar el precio de la gasolina. Nombró a Olga Lucía Acosta en el Banco de la República y cerró la puerta a la posibilidad de controlar esa junta. El Gobierno tiene una especie de dualidad: hay grandilocuencia en lo que trina y dice, pero lo que hace es más moderado”, aseveró Gaviria.
¿Y eso cambiará? le preguntaron, él comentó que lo ve improbable, porque con las movilizaciones de hace dos semanas, las cortes y el Congreso empezando a mostrar los dientes, el presidente se dio cuenta de que políticamente está más débil.
“No soy catastrofista, no veo un riesgo para una democracia que demuestra que funciona. Al contrario, lo que le digo a los empresarios es que deberíamos asumir con serenidad las tensiones que produce un Gobierno de izquierda. Hay un doble estándar: mientras Duque tuvo un año de aprendizaje, a él lo están criticando desde el día uno”, advirtió el economista y político colombiano.
Periodista económico en Vanguardia. Magíster en Estudios Políticos, de la Universidad de Caldas. Comunicador Social – Periodista, egresado de la Universidad Pontificia Bolivariana. De La Guajira.
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